Colombia. El embajador colombiano afirma que la clave con las farc es “convertir un proceso armado en un proceso social”

El embajador de Colombia en España, Fernando Carrillo, aseguró este jueves que el propósito fundamental del proceso de paz entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no es conseguir el final del conflicto “a través de una varita mágica”, sino “convertir un proceso armado en un proceso social”.
Así se pronunció Carrillo en un desayuno informativo celebrado hoy en Madrid, en el que subrayó que a los miembros de las FARC “jamás se les entregará un cheque en blanco”, sino que se les exigirá el “absoluto respeto hacia las reglas del juego democrático”.
En ese sentido, Carrillo destacó como logros de las conversaciones que ambos actores en conflicto mantienen en La Habana (Cuba) el hecho de que la guerrilla haya anunciado un “cese unilateral de fuego”, así como la consecución de un acuerdo en materia de narcotráfico, “lo que ha sucedido sin que se haya alcanzado el acuerdo final”.
Del mismo modo, otros de los aspectos que el embajador consideró relevantes fueron el compromiso de la guerrilla de dejar de reclutar menores a sus filas, además de la creación por parte del Ejecutivo de Uribe de una Comisión Asesora de Paz en la que se integran miembros de la oposición como el expresidente Andrés Pastrana.
“El Centro Democrático, el partido del expresidente Álvaro Uribe no se ha sumado pero se trabaja para que lo haga”, remachó.
Ello le sirvió para prevenir ante “los mitos del proceso de paz que han sido presentados por algunos ante la opinión pública como los talones de Aquiles de éste”.
PAZ FUNDAMENTAL
Entre esas “falsedades” recordó que “Colombia no ha sido entregada en las conversaciones con las FARC. Ha habido total transparencia. Lo importante en este momento es lo que sucede entre los actores que dialogan no lo que se dice delante de un micrófono”.
Carrillo también defendió que “no se está debilitando el papel ni la estructura de las Fuerzas Armadas colombianas. La reforma rural no pone en duda la propiedad privada. Ni la Constitución de Colombia ni su sistema económico están en juego. Toda crítica, siempre que sea constructiva es bien recibida, pero esta es una razón de estado para tomársela a la ligera”.
El embajador afirmó que los puntos en la agenda entre el Gobierno y la guerrilla “se están cumpliendo", y desgranó que ya se ha abordado el reparto de tierras, la vinculación con el narcotráfico y el alto el fuego, mientras que todavía quedan por resolverse los canales de participación política de los miembros de las FARC, así como los derechos de las víctimas, cuyo Día Nacional se conmemora hoy en Colombia, lo que, a su juicio, es “un asunto sensible y estratégico”.
Carrillo celebró que el proceso de paz “sea el primero de la historia que se basa en la jurisdicción de la Corte Penal Internacional (CPI)”, lo que, unido al apoyo de países como España, dota al mismo de “legitimidad internacional”.
Por otra parte, el embajador manifestó que todo lo acordado en las conversaciones de La Habana será sometido a referéndum para que el pueblo colombiano se pronuncie.
“El éxito del proceso es que no haya impunidad. Entre justicia y paz, está la justicia transicional. Las víctimas son el corazón del proceso de paz. Si ellas asumen todo lo desarrollado en el proceso, es que las cosas se están haciendo bien”.
Por último Carrillo citó al escritor y Premio Nobel de Literatura en 1982, Gabriel García Márquez, para expresar las expectativas que para Colombia tiene la consecución con éxito del proceso con las FARC: “La paz es la base del ejercicio de cualquier derecho”.