Concentración en madrd para pedir que los 'irregulares' no pierdan la tarjeta sanitaria

Unas doscientas personas pertenecientes a asociaciones sociales, ONG de inmigrantes, profesionales de la sanidad, sindicatos y partidos políticos se concentraron este sábado frente al hospital madrileño Gregorio Marañón para pedir al Gobierno que retire el decreto que deja a partir de hoy sin cobertura sanitaria a los inmigrantes en situación irregular.
En la concentración estaba la secretaria de Cooperación e Inmigración de la Federación madrileña del PSOE, Marisol Pérez Domínguez, quien además de exigir al Gobierno que "rectifique" esta medida, defendió el modelo de sanidad pública y universal “sin peajes, ni pagos, ni repagos”.
En su opinión, la decisión adoptada por el Ejecutivo, además de romper el modelo existente, lo ha hecho sin contar "con el resto de fuerzas políticas".
Asimismo, la diputada calificó la retirada de la tarjeta de medida "cruel, injusta, innecesaria e ineficaz", y que pasará a formar parte de la “historia de la infamia”.
"Se trata de una decisión “que no tiene impacto económico relevante y que sí tendrá repercusión en la salud y en las vidas” de estas personas, recalcó.
“Estamos aquí porque estamos en contra de la reforma que ha presentado el Gobierno para no atender a la parte más vulnerable de la sociedad, que encima que no tiene una legalidad, ahora no va a poder tener asistencia médica, como hasta ahora la habían tenido”, señaló Carlos Sánchez, microbiólogo del hospital Gregorio Marañón.
“Estamos de acuerdo en que la sanidad debe ser universal; todos los ciudadanos somos iguales, tengamos una tarjetita que nos acredite o no”, añadió.
En ese sentido, uno de los miembros del Movimiento Panafricanista señaló que “es injusto que los irregulares no puedan ser atendidos”.
“Yo no vengo por un tema personal, sino colectivo. Me parece una gran injusticia esta reforma sanitaria, que pone en duda la supuesta democracia y el estado de derecho, que algunos dirigentes políticos manifiestan en reiteradas ocasiones. Me parece que es una forma de violar algunos de los 30 artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos aprobada en 1942”, manifestó.
Por su parte, el director de la Federación Estatal de Asociaciones de Inmigrantes y Refugiados en España (Ferine) y miembro de la asociación de chilenos Violeta Parra, Víctor Sáez, aseguró que la reforma creará una segregación en la sociedad.
“Consideramos la reforma como injusta, ilegítima y lesiva a los intereses de las personas inmigrantes. Creemos que está segregando a gran parte de la sociedad, que está marginando a un sector importante de personas”.
“La ley anterior de la universalidad de la sanidad reflejó en su momento la integración como un proceso normal en donde los inmigrantes empezaban a formar parte de la sociedad española, y lamentablemente, esto se acaba hoy”, agregó.
Sin embargo, Sáez quiso manifestar su satisfacción por que algunas Comunidades Autónomas se hayan “rebelado” contra el decreto.
“De momento ya hay 1.800 médicos objetores de conciencia que están diciendo que no a la ley, y también ocho Comunidades Autónomas, por eso tenemos la esperanza de que luchando, a breve plazo la ley sea derogada”.
Por su parte, el portavoz de Médicos del Mundo, Mario Pérez, señaló que “pese a que hay comunidades que ya se han negado a aplicar el decreto, aun no se sabe cómo se va a resolver”.
“Todo es muy ambiguo, se habla de convenios con los inmigrantes, pero no sabemos cómo van a sufragar los gastos las comunidades, de momento nadie lo ha explicado”.
Con respecto al ahorro que se espera con esta medida, la mayoría de los asistentes coincidió en que ésta “no va a ser considerable”
“Pensamos que no va a ahorrar dinero; todo lo contrario, las enfermedades hay que curarlas lo antes posible, para que no supongan un gasto mayor después”, señaló el microbiólobo Sánchez y si los 'irregulares' no pueden ir al médico, irán a urgencias cuando no puedan más y el gasto será mayor, reflexionó.
Asimismo, Mario Pérez añadió que “lo que se va a producir es una saturación de las urgencias, que es una asistencia más cara que la primera o la preventiva”.