La Policía Local de La Algaba (Sevilla) y la Guardia Civil han detenido a un joven de 26 años cuando intentaba entrar en la casa de su expareja, de la que tiene una orden de alejamiento, horas después de quemar el salón de la vivienda durante una discusión con su exmujer, de la que tiene una orden de alejamiento por episodios violentos previos.
Según han informado fuentes policiales y recoge Efe, a mediodía del pasado sábado la mujer llamó a los servicios de emergencia ante el incendio que, presuntamente, había provocado su expareja en el salón de la casa, prendiendo el sofá del mismo.
Al lugar del suceso se desplazaron efectivos de los dos cuerpos de seguridad del estado y bomberos. Tras verificar que no se encontraban los menores de la pareja en el domicilio y que nadie de las viviendas del bloque corría peligro, los bomberos terminaron de sofocar las llamas y extrajeron el humo generado, mientras se comenzó al buscar al presunto autor de los hechos, sin éxito, por lo que se montó un dispositivo de vigilancia en torno a la casa para prever la posibilidad de que quisiera volver al inmueble.
Sobre las 00:45 horas del domingo, el hombre fue detenido cuando intentaba entrar nuevamente en el domicilio, en lo que se supone que es su segunda detención en 18 días y la tercera en menos de tres meses y medio.
El pasado 15 de julio, fue detenido tras una llamada de auxilio de sus familiares, tras haber entrado en el pajar de la unidad familiar sin consentimiento de su familia, y donde rompió todo lo que se encontraba en el interior y amenazó con incendiar el domicilio donde vivían sus padres, con ellos dentro. Además, durante el confinamiento fue denunciado en varias ocasiones por no respetar la obligación de permanecer en su domicilio.
En libertad con cargos
El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Sevilla, en funciones de guardia, ha dejado en libertad con cargos al joven de 26 años que fue arrestado. Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), el titular del juzgado le ha impuesto como medida cautelar la prohibición de comunicarse y de aproximarse a menos de 300 metros de la víctima.
Se le atribuyen presuntos delitos de amenazas e incendio, en un caso en que el Juzgado se ha inhibido en favor del de Violencia sobre la Mujer número 4 de Sevilla.
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