La Guardia Urbana de Barcelona ha detenido a un anciano de 88 años por presuntamente tratar de incendiar y querer hacer estallar su edificio en el distrito de Sants-Montjuïc en Barcelona conectando tres bombonas de butano, han informado a Europa Press fuentes de la policía barcelonesa.
Al parecer, el hombre tenía malas relaciones con sus vecinos y pudo actuar por venganza, aunque se trataba de problemas comunes de convivencia en el inmueble, situado en la calle de la Mare de Déu del Port.
El hombre amenazó a los vecinos porque, según él, le habían dañado una persiana y le habían sustraído el buzón, llegando a asegurar que los quería ver a todos muertos.
Cuando los agentes llegaron al edificio, los vecinos explicaron que el inquilino del tercer piso había sido el autor del incendio, ya que en anteriores ocasiones ya les había amenazado con que causaría daños en la propiedad como respuesta a su disconformidad con el resto de vecinos.
La mala relación vecinal había llegado al punto de que al anciano había vertido amenazas físicas, según los vecinos, que habían obligado a los vecinos y sus familiares a intermediar en el conflicto.
En el momento del incendio, la rápida actuación de los Bomberos evitó que la conexión entre tres bombonas de butano con un tubo de goma --preparadas para provocar una explosión-- llegara a producirse.
Después de que los Servicios Municipales accedieran a la vivienda del anciano, el hombre fue atendido en la misma terraza del inmueble para ser trasladado al Hospital Clínic, mientras afirmaba frases como: "Quiero matarlos a todos" y "No os preocupéis que volveré para terminar el trabajo que he empezado".
Precisamente, el anciano fue detenido como presunto autor de una tentativa de homicidio doloso y daños en la comunidad.
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