En España hay que educar en valores para frenar el 'bullying'

Diego González, el menor de once años que murió el pasado 14 de octubre volvió a ser noticia el miércoles 20 de enero tras conocerse la carta suicida que dejó a su familia antes de decidir quitarse la vida. “No aguantaba ir al colegio”, esa fue la causa que le llevó a Diego a tomar una decisión semejante, así lo defiende su familia. Sin embargo, la Policía descartó que se tratara de 'bullying'. Pero la lucha de sus padres para reabrir el caso ha llevado a que el Estado quiera tomar medidas e implantar un proyecto que trabaje desde dentro con esta situación. Lainformacion.com ha hablado con María Díaz, Graduada en Pedagogía Infantil y Diplomada en Magisterio de Primaria para preguntarle cómo se puede llegar a evitar casos como el de Diego.

El Gobierno español anunció el pasado viernes el proyecto mediante el cual quiere poner fin al acoso escolar. En este proyecto, que se incluye dentro del plan de convivencia escolar, se prevé la formación específica de profesores y una guía para padres de alumnos que estará prevista a partir de abril, según informó el ministro de Educación y Cultura, Íñigo Méndez de Vigo.Los profesores los primeros en formarse

“El primer fallo es que los docentes no estamos formados en temas de 'bullying', ni con recursos personales ni materiales”, afirma Díaz. “La primera medida que habría que adoptar sería que los profesores fuésemos formados para afrontar un caso de acoso escolar, tuviésemos expertos que nos informen sobre el tema y que ayuden al profesorado a prevenirlo. Hay que centrarse más en prevenir que en actuar después de que pase”.

Un buen método sería utilizar tutorías basadas en casos reales en los que los alumnos vean un caso específico como ejemplo. “Los niños funcionan mejor con casos reales. Les pones en escena y tratas qué se puede hacer en este caso, qué medidas se pueden tomar, cómo puedes ayudar al menor...”Los conocimientos curriculares siempre han ido delante de los valores

“Uno de los fallos del sistema educativo es que siempre se centra más en educar a los alumnos en contenidos que en valores. Y los valores como la empatía, la educación emocional, el que un alumno sepa ponerse en el lugar del otro... hay que trabajarla con los niños desde pequeños”, afirma Díaz.El trabajo tiene que estar repartido entre la familia y el colegio

“Es muy difícil que un profesor no se de cuenta de lo que le está pasando a uno de sus alumnos. Sólo podría entenderlo en el caso en el que se trate del principio de curso, que el profesor todavía no los conozca. Pero si el docente conoce al alumno, si ya estás metido en el curso y ves cambios de actitud en él, hay que hablar con otros profesores y así poder descartar que haya caso de 'bullying' o, en el caso en el que lo haya empezar a tratarlo”, apunta la profesora.

“No es cuestión de buscar culpables, pero el trabajo tiene que ser a partes iguales entre la familia del niño y el profesorado. Es decir, el niño pasa muchas horas en el aula, en el patio, o lo que es lo mismo, con el docente. Por lo que éste tiene que ser capaz de ver qué está pasando, si ese niño está sufriendo algún tipo de acoso, pero si no la familia es la siguiente en tener que notar que algo le está pasando al niño”, afirma la docente.

En el caso de Diego, el menor que se quitó la vida por el acoso escolar que sufría, el centro niega que tuviera conocimiento sobre lo que el niño estaba sufriendo. “Es muy importante la cooperación, el trabajo en equipo con los padres. Si ellos ven que algo no va bien, que el niño no quiere ir al colegio, ellos van a saber si su hijo no quiere ir al colegio porque no le gusta o porque hay algo detrás. Al igual que si el profesor observa que el niño cambia de actitud a lo largo del curso. Hay que mantener tutorías con los padres para poder evitar estos casos de acoso escolar”, señala Díaz.El riesgo de sufrir 'bullying' aumenta con la edad

A medida que los niños crecen, los casos de acoso escolar son más comunes. “En los primeros cursos de primaria se tiene en cuenta mucho más la figura del adulto, bien sea del padre o de la madre como del profesor. Sin embargo, a medida que se avanza los niños pasan a tener de referentes a otros semejantes, ese es el momento en el que más casos de 'bullying' pueden darse”, defiende la profesora.¿Cómo darse cuenta?

“Los niños en muchas ocasiones prefieren no acudir a los adultos por miedo a las represalias de sus compañeros. Por eso, hay que estar muy atentos a su comportamiento. Hay que conocerlos y saber el momento en el que algo no va como acostumbraba. Cualquier cambio hay que comentarlo entre otros profesores o con los padres y viceversa. Del mismo modo hay que intentar que ellos conozcan lo qué es el 'bullying', que sepan lo que pueden estar haciendo pasar a sus compañeros. Realizar charlas con las que el niño vea casos prácticos y sea capaz de empatizar con alguien que puede estar sufriendo este acoso”, termina Díaz.

Pese a que el presupuesto todavía no está cerrado el Gobierno quiere tomar las medidas inmediatas. En el mes de marzo está previsto que comience la formación al profesorado, las charlas a los padres en abril y los primeros datos oficiales de casos de acoso escolar estarán listos en junio.