España apoya la nueva misión de la ue en libia para acabar con una tragedia que no se “puede repetir”


El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel Garíca-Margallo, aseguró este lunes que España contribuirá según sus “disponibilidades, posibilidades y la ayuda que se nos pida” en la nueva misión que la UE ha aprobado para acabar con las mafias que trafican con personas en Libia.
Así se pronunció Margallo, en una rueda de prensa conjunta en Bruselas con el ministro de Defensa, Pedro Morenés, en la que explicó que en el Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la UE, al que también asistieron los titulares de Defensa de los Estados miembros y el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, se aprobaron dos documentos: uno en el que se desarrolla una operación política común de seguridad y defensa para desmantelar las redes de tráfico de seres humanos en el Mediterráneo central y otro que elabora y diseña la gestión de crisis, que es el que explica el procedimiento para poner en marcha la anterior operación.
El titular de Exteriores subrayó que la operación aprobada por la UE consta de tres fases “centrales”, a la que se suma una cuarta. La primera de ellas consiste en la valoración de la situación, “lo cual obligará a un esfuerzo en materia de información”. La segunda de las mismas se centra en la captura y abordaje de embarcaciones de navíos en alta mar en aguas internacionales y la tercera, en la neutralización de esos navíos o las instalaciones complementarias en aguas territoriales, o aguas o territorio internos Libia.
Margallo precisó que “para transitar a la tercera fase es preciso contar previamente con una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, bajo el capítulo 7 de la Carta de dicha institución. “España está trabajando muy activamente en la redacción de esta resolución. Si no la hay, bastaría para cumplir con los requisitos de la legalidad internacional una solicitud expresa de intervención por parte de las autoridades legítimas de Libia”, remachó.
El ministro también afirmó que el Consejo ha señalado “las incertidumbres y las cuestiones pendientes de aclaración antes del lanzamiento operativo de la misma: base jurídica, tratamiento y gestión de los inmigrantes rescatados (la inmensa mayoría emigrantes por razones económicas y por razones de protección internacional), desembarco y distribución de los mismos. El Gobierno confía en que esas cuestiones sean aclaradas antes de junio” (fecha en la que los titulares de Exteriores dela UE se reunirán para concretar la misión hoy aprobada).
Margallo explicó que “el gran contingente de los migrantes es por razones económicas en Libia. No son libios. Vienen de Eritrea, vienen de Somalia, vienen del África subsahariana. Lo que se está produciendo es el aprovechamiento de ese Estado vacío para utilizarlo como lugar de tránsito. Cuando se controle la situación en Libia se utilizará otro lugar como medio de salida”.
Por esa razón, apuntó que “hay que acabar con los conflictos en origen: con las guerras, con las persecuciones étnicas, con las persecuciones políticas, persecuciones religiosas, acabando con la pobreza. Esos son temas a largo plazo”, al tiempo que aclaró que “hay un gran tema que a veces se olvida. La renta de la UE es 15 veces superior a la media de la renta de África. Cuando hay una gran descompensación de este tipo el incentivo para emigrar es importante. Hay que favorecer el crecimiento, el desarrollo y el empleo en los países de origen. Hay que controlar también la inmigración irregular”.
Por último, Margallo dijo que la nueva misión consiste en “inutilizar los buques para que no puedan que seguir en operaciones ulteriores de tráfico de personas para evitar una tragedia que no podemos tolerar que se repeta”.

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