Toledo.- Los ministros de Inmigración de la Unión Europea, reunidos hoy en el Consejo informal de Justicia e Interior que se celebra en Toledo, han sentado las bases para el desarrollo de una futura política comunitaria de "inmigración legal", que incluirá un mayor control en las fronteras y planes de integración.
Así lo han resaltado en una rueda de prensa conjunta la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, y el vicepresidente de la Comisión Europea, Jacques Barrot, quienes han coincidido en que Europa tiene que afrontar el reto de la inmigración desde la perspectiva de la legalidad e impulsando medidas para integrar a los inmigrantes en el mercado laboral.
Durante la reunión del Consejo, los responsables de inmigración de Grecia, Francia y Malta han presentado formalmente a la presidencia española de la UE la carta en la que piden que se refuerce la vigilancia de las fronteras exteriores comunitarias para prevenir la inmigración ilegal.
En el documento, según han informado fuentes comunitarias, se insiste en que el fenómeno de la inmigración no se puede abordar únicamente desde la legalidad y hay que seguir buscando fórmulas para luchar contra la inmigración irregular y clandestina.
En respuesta a estas reclamaciones, el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Interior, Jacques Barrot, ha anunciado que el próximo 25 de enero se firmará un acuerdo para reforzar la vigilancia de las fronteras exteriores marítimas coordinadas por Frontex.
Así, ha recordado que se esta preparando una revisión del reglamento de Frontex para dotar de más medios y capacidades añadidas a la agencia que se encarga del control de las fronteras de la Unión para que trabaje en colaboración con los países de origen y organice mejor los vuelos de repatriación.
En este sentido, se ha realizado un proyecto piloto en Malta con trescientas personas y se establecerán acuerdos de colaboración con Turquía en Ankara el 19 de febrero y con Libia en fecha por concretar.
Sobre la carta de Francia, Grecia y Malta, Rumí se ha limitado a señalar: "se ha escuchado, se ha tomado nota, y trabajaremos sobre ello".
Otro de los compromisos de los ministros de inmigración de la UE que sale de este Consejo informal de Toledo es la puesta en marcha, a iniciativa española, de un plan de acción para menores no acompañados que fije los instrumentos necesarios para "acogerles, protegerles y velar por la devolución a sus países", ha dicho Barrot.
El objetivo que persigue la presidencia española es establecer también un reparto solidario de la carga financiera que suponga este proyecto, y Barrot ya ha avanzado que España contará con su apoyo en esa propuesta.
La integración de los inmigrantes en el mercado laboral de los diferentes Estados miembros en un contexto de crisis económica ha sido otro de los asuntos que los responsables europeos se han marcado como prioridad, con la intención de encontrar medidas de integración que garanticen la igualdad de oportunidades de los inmigrantes con el resto de los ciudadanos europeos.
Estas medidas se debatirán el próximo mes de abril en Zaragoza, donde está previsto que se celebre la cuarta Conferencia de Integración de la Unión Europea.
Al concluir los trabajos de esta primera jornada del Consejo informal de Justicia e Interior de la UE y tras la tradicional foto de familia, los ministros europeos han realizado una visita a la catedral de Toledo y posteriormente asistirán a una cena oficial en el Museo de Santa Cruz.
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