Eva Kreisler: "Hay trabajadores en Bangladesh que se endeudan para pagar la curación de sus accidentes laborales"

Bangladesh, 2005: 61 trabajadores mueren y otros 86 resultan heridos al derrumbarse un edificio de nueve plantas lleno de fábricas.

Pakistán, septiembre de 2012: más de 300 muertos en dos incendios de factorías textiles.

Bangladesh, noviembre de 2012: 112 trabajadores de la fábrica de ocho plantas Tazreen Fasion mueren por un incendio.

¿A quién le puede extrañar que hace una semana murieran en Dacca casi 400 personas, por el derrumbe del destartalado edificio de ocho plantas en donde trabajaban? Desde luego, a Eva Kreisler no. Ella es coordinadora de la red internacional Campaña Ropa Limpia, organización que agrupa a más de 300 organizaciones luchan por los derechos laborales en todo el mundo. Desde hace 20 años llevan denunciando las condiciones miserables de muchos trabajadores en el mundo sin primeros de mayo que celebrar con nosotros. Pero fabrican muchas de las prendas que vestimos todo el año.

¿Cuál es el país más explotador del mundo en la industria textil?
Bangladesh. Un trabajador de una empresa textil puede estar cobrando unos 32 euros al mes. En estas condiciones, la industria ha crecido mucho, pero sin las correspondientes mejoras en la seguridad de las fábricas. Son las más peligrosas del mundo

¿Qué empresas españolas tienen vínculos con el sector de la confección en Bangladesh?
Inditex, Mango y El Corte Inglés...Nosotros no hacemos listas de empresas buenas y malas. Sabemos que la industria de la confección es compleja; hay mucha subcontratación. Lo que pedimos a las empresas es que tomen cartas en el asunto y emprendan mejoras estructurales, porque está claro que algo falla en su cadena de suministro.Inditex cuenta con centenares de proveedores distintos en todo el mundo.

¿Cómo ha actuado Inditex y las otras empresas españolas ante el desastre?
En los últimos casos en los cuales se ha visto implicada ha reaccionado con rapidez; ha indemnizado a los trabajadores de fábricas accidentadas, pero todavía no se ha comprometido a fondo con un programa de seguridad en los centros de trabajo. Mango y el Corte Inglés también muestran buena voluntad, pero aún falta que los buenos deseos se concreten en realidades.

¿Y las empresas extranjeras?
Son muchas. La mayor parte de las empresas líderes de la industria de ropa tienen producción en Bangladesh:Walmart, Carrefour, Inditex, H&M o Gap, por ejemplo, cuentan con una red muy amplia de proveedores.Wall Mart y Disney ni siquiera acudieron la reunión convocada por el sindicato IndustriAll para acordar la indemnización a las víctimas del incendio de Tazreen, aunque está demostrado que producían en aquella fábrica.

SUBCONTRATAS DE SUBCONTRATAS DE SUBCONTRATAS

Entiendo que las multinacionales españolas y extranjeras también tienen sus códigos éticos.
Sí, algunas llevan tiempo con ellos, pero a la vista está que las auditorías sociales que revisan el cumplimiento de los códigos de conducta han fallado por todas partes. El último edificio que se derrumbó había pasado auditorías de la iniciativa BSCI. El de Pakistán también, pero la auditoría había sido realizada por una subcontrata pakistaní de otra empresa italiana que a su vez había sido subcontratada por la multinacional. Con ese modelo no se puede funcionar.

Entonces, ¿las multinacionales tienen realmente conocimiento de lo que ocurre en esos centros de trabajo?
Yo creo que su responsabilidad es saber dónde se produce su ropa y bajo qué condiciones laborales; así al menos no puede pillarles por sorpresa cuando se enteran. Igual que cuidan la calidad de sus productos deberían cuidar la seguridad de las personas que los producen.

Pero eso sería responsabilidad de los gobiernos, ¿no?
Por supuesto, deben garantizar la libertad sindical e impedir el hostigamiento de los sindicalistas y trabajadores que alzan la voz. Pero hay que considerar también los intereses que unen al poder político y a las fábricas de ropa. Sobre todo en un país que recibe el 80 por cuenta de las exportaciones de este sector.

La relación comercial de las transnacionales en estos países es muy volátil. Los pedidos se trasladan de país con mucha facilidad y no invierten en las fábricas donde deslocalizan la producción. Lo razonable sería que las multinacionales reinvirtiesen parte de sus beneficios en mejorar la seguridad laboral de estos centros.

"LAS VÍCTIMAS DEL INCENDIO DE HACE MESES NO HAN SIDO INDEMNIZADAS"

¿Y mientras todo esto se concreta, qué pasa?
Pues que los trabajadores explotados ni pueden vivir dignamente de su trabajo ni cubrir sus necesidades básicas. Algunos incluso tienen que endeudarse para pagar los cuidados médicos con que curar las heridas que han sufrido en accidentes laborales. Te pongo un ejemplo: buena parte de las víctimas del incendio de noviembre de 2012, que causó 112 muertos, todavía no han sido indemnizadas.

Lamentable.
Lo más lamentable es esto va a volver a ocurrir tarde o temprano, a menos que no hagamos algo. Hay que presionar a gobiernos y empresas para conseguir que se garanticen unos mínimos de seguridad en las fábricas: no es sólo cuestión de obtener indemnizaciones, sino de evitar nuevas tragedias. O toman medidas estructurales o en pocos meses volveremos a ver lo mismo.Las últimas tragedias han sido tan terribles y dolorosas que algo tiene que cambiar.

Pero las multinacionales podrán decir: "oiga, nosotros no somos responsables de lo que ocurra en unas empresas que hemos subcontratado...".
Cada vez son menos las multinacionales que salen con esta excusa, aunque todavía quedan algunas muy importantes que se escaquean, como Wal-Mart. En enero de este año hubo un incendio en que murieron 8 mujeres. La española Inditex, que producía allí, contribuyó al pago de las indemnizaciones. El Corte Inglés acudió a la mesa para calcular las indemnizaciones de las víctimas. Falta que se firme un programa vinculante para mejorar la seguridad en las fábricas de Bangladesh

"LAS MULTINACIONALES DEBERÍAN INVERTIR EN LA SEGURIDAD DE LAS FÁBRICAS; NO POR CARIDAD SINO POR JUSTICIA"

¿Donativo o justicia?
No estamos pidiendo ni caridad ni proyectos de cooperación, sino que se garanticen los derechos humanos y los derechos laborales de personas tan dignas como cualquier trabajador occidental. Sabemos que no resulta fácil. Para que el trabajador perjudicado reciba su indemnización debemos demostrar el vínculo que existe entre multinacional y fábrica. Incluso entre fábrica y empleado: a algunos empleados les resulta muy complicado demostrar que trabajaban ahí, porque ni siquiera les hacen contrato.

¿Y qué deberían hacer los gobiernos de los países donde están radicadas las multinacionales?
Deberían exigir a las multinacionales que respeten los derechos humanos en cualquier parte del mundo y vigilar que esto se cumpla. El parlamento europeo ha adoptado una resolución en la que pide a las empresas que investiguen de manera crítica la situación de las fábrica de Bangladesh. La OIT también está jugando un papel activo. Esta tragedia debe servir para que todos los actores implicados se sumen y se logre un cambio real.

¿Qué derechos, exactamente?
Los que están reconocidos en la Carta de Derechos Humanos de la ONU y en los convenios de la Organización Internacional del Trabajo. Los mismos que aquí en España nos parecen tan normales, como el derecho a formar sindicatos, a organizarse laboralmente, a negociar de forma colectiva... ¡hasta el derecho a la integridad física!

Ese último no es un derecho laboral, estrictamente hablando.
EnBangladesh se espía a las organizaciones que luchan por los derechos laborales. El año pasado fue torturado y asesinado un sindicalista, Aminul Islam. El caso no se ha resuelto. Los sindicatos sometidos a un hostigamiento bestial. Para lograr mejores en las condiciones de trabajo primero debemos exigir que se respete del derecho de los trabajadores a organizarse sindicalmente.

"DESPUÉS DE LA TRAGEDIA, COSTABA QUE SALIERA A RELUCIR EL NOMBRE DE DETERMINADAS MARCAS"

¿Cree que el consumidor español estaría dispuesto a pagar más por la ropa a cambio de garantizar mejores condiciones de los trabajadores que la producen?
Sí, incluso en momentos de crisis como ahora. Los occidentales en general están cada vez más concienciados de este problema; nos indignamos cuando tienen noticia de accidentes laborales tan terribles. Pero no haría falta que el consumidor pagara más si se moderasen los márgenes de beneficios de las multinacionales. Ya ganan los suficiente para cubrir el incremento de los costes que implica la mejora de la seguridad de las fábricas.

Mucha gente pensará: "Si hacemos esto por el sector de la ropa, tendríamos que hacer lo mismo con los juguetes, los productos del campo o el todo a 100 de las tiendas de chinos".
Es que probablemente habría que plantearselo y poner en primer lugar la protección de los derechos humanos. Habría que blindar esta protección con leyes y marcos regulatorios internacionales. Las relaciones comerciales están mucho más protegidas que los derechos humanos.

¿Notan cierta reticencia de los medios a publicar sus denuncias, que afectan a potentes anunciantes?
Sí, creo esta presión existe, sobre todo ahora que los medios están sufriendo por la crisis publicitaria. En los primeros días tras la última tragedia, costó que salieran a relucir los nombres de ciertas empresas. Somos conscientes de que los periodistas estáis haciendo un duro trabajo, porque trasladar este mensaje no es nada fácil.

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