Gobierno e indígenas colombianos abren el diálogo en el Cauca

  • El Gobierno colombiano y los indígenas del del Cauca (suroeste) constituyeron hoy una mesa de diálogo tras los graves sucesos de las últimas semanas y programaron para el viernes una nueva reunión para profundizar en los "derechos humanos" de los nativos, que viven entre el fuego de la guerrilla y la fuerza pública.

Bogotá, 23 jul.- El Gobierno colombiano y los indígenas del del Cauca (suroeste) constituyeron hoy una mesa de diálogo tras los graves sucesos de las últimas semanas y programaron para el viernes una nueva reunión para profundizar en los "derechos humanos" de los nativos, que viven entre el fuego de la guerrilla y la fuerza pública.

Así lo reveló a los periodistas el ministro del Interior, Federico Renjifo, al término de esta primera cita, en la localidad de Santander de Quilichao, donde los indígenas estuvieron representados por la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (Acín) y el Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric).

"Hoy se instaló esta mesa, hubo un buen ambiente, un diálogo abierto, no hubo ningún problema. Las comunidades indígenas expusieron sus temas y lo mismo hizo el Gobierno", explicó Renjifo.

El ministro anunció que ambas partes acordaron continuar el próximo viernes, 27 de julio, el diálogo en Popayán, capital del convulso departamento del Cauca.

Allí "vamos a discutir el tema de derechos humanos para los pueblos indígenas", apuntó Renjifo.

En la primera cita, pactada el pasado jueves tras días de tensión en el Cauca, tanto los indígenas como el Gobierno plantearon hoy sus inquietudes.

Los indígenas envueltos en la negociación, que representan a unos 100.000 integrantes del pueblo indígena nasa, exigen la desmilitarización del Cauca, y por consiguiente la salida de todos los actores armados de su territorio ancestral, tanto guerrilleros como fuerza pública.

Además, el líder nasa Rafael Coicué solicitó al Gobierno que no se les estigmatice y señale como guerrilleros ni como 'mandaderos' (mensajeros) de la guerrilla.

"La presencia del ministro tiene que ver con el tema que comencemos ya a buscar caminos y la ruta para la salida negociada del conflicto, teniendo en cuenta que nosotros no somos mandaderos de la guerrilla", dijo Coicué a los periodistas.

Aclaró que los nasas constituyen "una organización autónoma, responsable" y que sus decisiones "se toman en asambleas y congresos" en sus territorios.

Entre las acciones que llevaron a establecer la mesa de diálogo se encuentra la decisión de los indígenas de desalojar la semana pasada a los militares que ocupaban una base cercana a la localidad de Toribío, lo que derivó en enfrentamientos con la fuerza pública un día después.

A eso se unió que los nativos detuvieron a cuatro presuntos guerrilleros de las FARC, a los que juzgaron bajo sus leyes ancestrales y les castigaron con latigazos.

La región de los nasas, en el norte del Cauca, es desde hace décadas un gran escenario de guerra en Colombia, y ante ello los indígenas se han declarado neutrales en el conflicto al verse entre el fuego de la guerrilla y la fuerza pública.

Esos enfrentamientos les han hecho perder bienes y vidas humanas de forma constante.

Los nasas o paeces, como también son conocidos, han ocupado en los últimos días guarniciones y bases de los uniformados para forzar su salida, lo que ha provocado choques que incluyeron heridos y detenidos.

También se han dirigido, armados con bastones de madera y acompañados por la llamada Guardia Indígena, a campamentos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y han obligado a los guerrilleros a levantarlos y a que se trasladen a otros lugares.

Esas refriegas provocaron la muerte a dos personas, uno de ellos el joven nasa Fabián Cuetía, de 22 años, quien fue alcanzado por disparos de militares el 18 de julio en una carretera cercana a la localidad de Caldono.

Y el campesino Mauricio Largo, de 27 años, quien falleció el jueves pasado en la pequeña localidad de Huasanó, tras recibir un impacto de bala en la espalda.

Pero ahora el ambiente es de "buena voluntad", según Renjifo, quien adelantó que aunque no hay un cronograma definido, "no puede ser un diálogo por muchos días".

En el encuentro de este lunes participaron también por parte del Gobierno el alto consejero para Asuntos Políticos y delegado presidencial para el Cauca, Aurelio Iragorri, y la viceministra para la Participación e Igualdad de Derechos, María Paulina Riveros.

Asimismo, estuvo el representante en Colombia de las Naciones Unidas, Bruno Moro, así como delegados de la Defensoría del Pueblo y de la Procuraduría General de la Nación (ministerio público).

Mostrar comentarios