Hermanos Musulmanes egipcios niegan querer concentrar poder tras último gesto

  • El presidente del Partido Libertad y Justicia (PLJ), Mohamed el Mursi, negó hoy que los Hermanos Musulmanes de Egipto pretendan concentrar el poder tras anunciar que presentarán a un candidato para los próximos comicios presidenciales.

El Cairo, 1 abr.- El presidente del Partido Libertad y Justicia (PLJ), Mohamed el Mursi, negó hoy que los Hermanos Musulmanes de Egipto pretendan concentrar el poder tras anunciar que presentarán a un candidato para los próximos comicios presidenciales.

El dirigente del PLJ, una formación derivada de los islamistas Hermanos Musulmanes, tachó de "infundados" los temores que han surgido en el país sobre las intenciones de este grupo, que ya controla la mitad de la cámara baja del Parlamento y buena parte de la Asamblea Constituyente.

"Es un intento de propaganda decir que queremos controlar todos los cargos de liderazgo. Los Hermanos Musulmanes siguen manteniendo su principio de asociarse y no dominar" al resto, apuntó Mursi.

Los Hermanos Musulmanes se habían comprometido a no aspirar a la jefatura del Estado en las elecciones presidenciales que se celebrarán en mayo próximo, las primeras tras el derrocamiento del presidente Hosni Mubarak, en febrero de 2011.

Sin embargo, el grupo islamista anunció ayer que presentará a su "número dos", Jairat al Shater, para concurrir a estos comicios después de que este fuera elegido en una ajustada votación que puede tener importantes consecuencias debido al enorme peso popular del movimiento.

Mursi destacó también "la fuerza de la que goza el candidato y su gran oportunidad para obtener el cargo".

El presidente del PLJ argumentó que entre las causas que llevaron a los Hermanos Musulmanes a presentar un aspirante presidencial están la lentitud del proceso de transición democrática o la deficiente gestión del Gobierno actual de Kamal Ganzuri, a quien no han conseguido destituir.

Al Shater, ingeniero de 62 años, está considerado el factótum de los Hermanos Musulmanes, a los que ha aportado grandes cantidades de dinero obtenidas por el rendimiento del conglomerado empresarial que controla.

El previsible candidato, que deberá todavía recibir la aprobación de la más alta instancia del grupo, fue condenado el 15 de abril de 2008 a siete años de cárcel por blanqueo de dinero y pertenencia a una organización prohibida, aunque tras el triunfo de la llamada Revolución del 25 de Enero fue excarcelado y se espera que reciba el indulto de la Junta Militar para concurrir a las elecciones.

Junto a Shater parten como favoritos el exsecretario general de la Liga Árabe, Amro Musa, el jeque salafista Hazem Abu Ismail, y el exdirigente de los Hermanos Musulmanes Abdelmoneim Abul Futuh.

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