La fao y cruz roja unen sus fuerzas contra el hambre en el mundo

La Organización de las Naciones Unidas para Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) suscribieron este jueves en Roma (Italia), en el marco del Día Mundial de la Alimentación, un nuevo acuerdo de colaboración para ayudar a mejorar la seguridad alimentaria en las comunidades más vulnerables.

En virtud de este acuerdo, la FAO proporcionará orientación técnica a la extensa red de 13 millones de voluntarios de la FICR, la mayor organización humanitaria del mundo, con el fin de ayudar a los hogares pobres a hacer frente al impacto de los desastres naturales en la agricultura y mejorar la seguridad alimentaria y la nutrición de las personas más desfavorecidas.
“Estamos comprometidos a dar un paso más en nuestra colaboración para reforzar nuestras voces y nuestro trabajo para los agricultores más vulnerables, los pastores, los pescadores, las comunidades que dependen de los árboles y las personas cuyos medios de vida dependen del acceso y la disponibilidad de los recursos naturales”, subrayó el director general de la FAO, José Graziano da Silva, durante el acto de la firma del acuerdo.
Por su parte, el secretario general de la FICR, Bekele Geleta, señaló que “las sociedades nacionales de la Cruz Roja han estado respondiendo a los efectos de la sequía y los desastres durante décadas a través de la labor de los voluntarios en las comunidades de todo el mundo y vemos cómo el hambre y la malnutrición afectan a la vida de las personas vulnerables en de todas las etapas de sus vidas”.
"Al hablar de inseguridad alimentaria, no es suficiente abordar sólo los aspectos de la producción de alimentos y el acceso. Tenemos que reconocer colectivamente que debemos cambiar nuestra forma de trabajar y la forma en que invertimos para hacer frente a los problemas subyacentes de la vulnerabilidad , como la pobreza y la eventos climáticos extremos”, añadió.
La FAO y la FICR se han comprometido a elaborar un plan de acción por un periodo de tres años, que incluye acciones para abordar el cambio climático y la degradación de las tierras, incluyendo la plantación de árboles y la gestión sostenible del agua, así como para reducir las pérdidas de alimentos.
Países y regiones como el Sahel (África subsahariana occidental) y el cuerno de África contarán con actividades comunes de estas dos organizaciones, que prestarán especial atención con especial atención a los grupos marginados, como los pequeños productores de alimentos, las mujeres, los jóvenes y las personas mayores cuyos medios de vida dependen de los recursos naturales.