Médicos y expertos insisten en que el cigarrillo electrónico es dañino


Representantes de organizaciones médicas y sociales calificaron este miércoles de “decepcionante” la regulación del cigarrillo electrónico aprobada en el Congreso de los Diputados, porque no equipara este dispositivo al cigarro tradicional, a pesar de que también tiene nicotina y están probados sus efectos nocivos en la salud.
Así se manifestó en rueda de prensa el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Juan José Rodríguez Sendín, acompañado por Francisco Rodríguez Lozano, presidente del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo; Estévez Fernández, presidente electo de la Sociedad Española de Epidemiología; Carlos Macaya, catedrático y presidente de la Federación Española de Asociaciones Científico-Médicas; Pilar de Lucas, presidenta de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica; Raquel Fernández Megín, presidenta de Nofumadores.org; María Fernández, vicepresidenta de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria, y Fernando Martín, médico del Servicio Cántabro de Salud que ayuda a personas a dejar su adicción al cigarrillo electrónico.
Estos especialistas, que anunciaron que en breve redactarán un comunicado para abordar este asunto, al que quieren sumar a otras organizaciones sanitarias y ciudadanas, explicaron que la normativa, que ahora se debatirá en el Senado, donde esperan que los políticos les escuchen y rectifiquen, no prohíbe fumar los cigarrillos electrónicos en todos los lugares públicos.
Sólo queda prohibido en edificios de la Administración, centros de salud y escuelas donde estén menores de edad, por lo que a su juicio se verán discriminados colectivos como el de los camareros.
Además, criticaron que solamente se prohíba la publicidad de este dispositivo en horario infantil, a diferencia de lo que sucede con el tabaco convencional, cuya publicidad, desde 2010, está “infinitamente más limitada”.
PUERTA DE ENTRADA AL TABACO
Los expertos advirtieron de que estos cigarros tienen efectos secundarios negativos para la salud, pues además de llevar nicotina, no es una forma de dejar de fumar. “Sucede todo lo contrario: es la puerta de entrada para que muchos exfumadores vuelvan a iniciarse en el consumo del tabaco, y para muchos jóvenes y adolescentes que empiezan a ver cómo vuelve a ser algo socialmente bien visto el hábito de fumar, lo que rompe el espíritu de la ley antitabaco de 2010, que tanto beneficio ha reportado”, advirtió el presidente electo de la Sociedad Española de epidemiología.
Además, el presidente del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo explicó que este cigarrillo no puede ser vendido a la gente como un medicamento para dejar de fumar, porque todos los fármacos pasan un proceso de investigación clínica, cosa que no ha sucedido con este producto.
“Tampoco puede compararse con las terapias para dejar de fumar, porque están enfocadas a que duren muy poco tiempo, como por ejemplo los parches de nicotina, y el cigarrillo electrónico es un nuevo compañero que llega a la vida de quienes lo consumen para quedarse”, remachó.
Francisco Rodríguez explicó además que pasarán decenas de años hasta que puedan probarse los efectos de este dispositivo a largo plazo, por lo que no se debe esperar a actuar hasta el momento en que el 'vapear' se cobre la vida de mucha gente. “De hecho, está probado que las partículas que emite este producto son absorbidas por las células más rápidamente”, agregó.
Por todas estas razones, estos especialistas piden a los parlamentarios que regulen el cigarrillo electrónico como el cigarro convencional, “porque de lo contrario sólo caben dos posibilidades: que los políticos tengan una gran ignorancia sobre este tema o que hayan recibido presiones por parte del sector de las tabaqueras. Yo espero que sea lo primero”, concluyó el presidente de la OMC.

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