Bangkok, 1 abr.- Al menos medio millón de personas han sido desplazadas en Camboya debido a expropiaciones forzosas de sus tierras promovidas por el Estado desde el año 2000, denunció hoy una organización camboyana de defensa de los derechos humanos.
Según Licadho, la cifra se alcanzó después de que 2.246 familias hayan sido forzadas a abandonar sus propiedades debido a concesiones a empresas privadas durante los primeros dos meses de 2014.
"Medio millón de personas afectadas supone un hito realmente vergonzoso. Cada uno representa una vida arruinada en potencia, un individuo que se enfrenta a dificultades severas y de larga duración", dijo la portavoz de Licadho, Naly Pilorge.
"Sin tierra se quedan sin medios para proporcionarse los mínimos para una vida decente. El Gobierno debe actuar ahora para poner fin a esta epidemia de expropiaciones", añadió Pilorge en un comunicado.
Miles de camboyanos son expulsados de sus propiedades cada año, muchas veces con violencia por parte de las fuerzas de seguridad, debido a concesiones gubernamentales para el desarrollo de proyectos urbanísticos, construcción de presas o para plantaciones.
Las expropiaciones forzosas persisten pese a que el Gobierno camboyano aprobó en mayo de 2012 suspender el otorgamiento de nuevas concesiones y revisar las existentes, y en 2013 puso en marcha un plan para garantizar títulos de propiedad a los residentes.
Licadho reclamó al Gobierno que ponga fin a estas confiscaciones y ofrezca compensaciones adecuadas a los afectados.
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