Beirut, 2 dic.- Un "emir" checheno del grupo yihadista Estado Islámico (EI), Asadulá al Shishani, murió en las últimas horas en un ataque de los radicales para recuperar el control de varias áreas tomadas por las fuerzas kurdas en la ciudad kurdo siria de Kobani, dijo hoy a Efe un responsable de este enclave.
El viceministro de Asuntos Exteriores del Gobierno autónomo de Kobani, Idris Nuaman, señaló por teléfono que combatientes del EI de origen caucasiano llevan intentando desde la pasada medianoche retomar zonas que les han arrebataron los kurdos en los últimos tres días en el sureste de la localidad.
Los enfrentamientos se concentran en las inmediaciones de un complejo gubernamental de seguridad, de donde se habían replegado los extremistas.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos agregó que el EI trata también de hacerse de nuevo con el control de un mercado de verduras en el este de Kobani.
La ONG subrayó que junto al dirigente checheno fallecido hay otros veinte miembros de la organización radical muertos en los combates, además de tres guerrilleros kurdos.
Mientras, los aviones de la coalición internacional bombardearon hoy posiciones del EI en el interior de Kobani.
Los kurdos recuperaron ayer el dominio del barrio de Butan en el oeste de la población, situada en la provincia septentrional siria de Alepo y fronteriza con Turquía.
El EI inició una ofensiva contra Kobani el pasado 16 de septiembre y, tras avanzar rápidamente en las primeras semanas, su progreso se vio frenado después de la llegada a finales de octubre de refuerzos de "peshmergas", fuerzas kurdas enviadas por el gobierno autónomo del Kurdistán de Irak.
Kobani es uno de los tres principales enclaves kurdos de Siria, junto a Afrín, en Alepo, y Al Yazira, en Al Hasaka (noreste).
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