En plena crisis del coronavirus

La prostitución no se confina: "Continúa la demanda y aceptarán para sobrevivir"

Desarticulada una red de prostitución en Málaga.
Desarticulada una red de prostitución en Málaga.

España es el primer consumidor de prostitución de Europa y el tercero del mundo y ni el mismísimo coronavirus logra que se frene en seco la demanda de estos servicios. Ayer mismo los Mossos d'Esquadra cerraban un conocido prostíbulo en una localidad de Barcelona. Dos coches aparcados en el parking de una sala de fiestas alertó a los agentes que estos días vigilan las calles para que se cumpla a rajatabla el confinamiento obligado para todos los ciudadanos desde que hace tres semanas el gobierno decretara el estado de alarma. Ese parking delante del establecimiento junto a una vía de servicio de la carretera en el municipio de Orís debería estar vacío. Llamaron a la puerta y se encontraron a dos clientes que ahora se enfrentan a una sanción cuya cuantía puede ir desde los 600 euros a los 30.000 euros. El dueño del establecimiento también tiene pendiente un expediente sancionador. Las dos mujeres que estaban ejerciendo la prostitución fueron advertidas de la prohibición de hacer su trabajo en el local

La crisis del coronavirus las está poniendo en jaque. Algunas han podido quedarse en las habitaciones de los burdeles y son los propios dueños los que ejercen de 'caseros'. Pero ¿hasta cuándo? Otras se han visto en la calle con una maleta. ¿Dónde van ahora? La mayoría han optado por protegerse ante el coronavirus aunque esto les suponga estar en situaciones precarias y han dejado de ejercer. Pero según pasan los días y como la demanda de sus servicios no les falta, serán muchas las que tengan que volver para intentar sobrevivir, según están comprobando en  Médicos del Mundo y relatan a  La Información.

El caso de este prostíbulo no es la tónica general. Según ha podido comprobar esta ONG y confirman a este medio desde los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, la mayoría de los clubes de carretera y pisos en los que se ejerce la prostitución han cerrado sus puertas ante la actual situación de estado de alarma. Pero eso implica que ahora algunas se vean abocadas a ejercer con prostituidores que ya conocen y que suelen actuar en polígonosY la situación se agrava aún más cuando las mujeres mantienen una deuda con sus explotadores "que crece a medida que se alarga el confinamiento ingresando cero euros al día", por lo que atienden toda la demanda que pueden, enfrentándose sin medios a una pandemia que en España ha dejado ya unas 12.000 muertes. 

Son muchos los testimonios que llegan hasta las sedes de Médicos del Mundo desde donde siguen manteniendo la atención psicológica ahora mediante llamadas. Se ponen en contacto con ellas para intentar que tengan comida, piso, productos de higiene y material de prevención contra el Covid-19. Muchas piden socorro. Expresan el temor a que el confinamiento se alargue y no tengan ni para comer, como sucedió en un prostíbulo de Aragón al que acudió el pasado lunes la coordinadora de la zona para entregarles una caja con comida porque "el dueño se ha marchado y las ha dejado allí y no tienen ni para ir a comprar unas compresas". Y teme que "cuanto más tiempo el virus nos tenga encerrados haya mujeres que tengan que acabar aceptando servicios para sobrevivir". Otra llamada desesperada llegó desde un piso en Canarias. Su inquilina asegura que no puede seguir haciendo frente al alquiler de la habitación que le han dejado porque en los ahorros solo le quedan para comprar un paquete de pasta "por lo que mañana ya no podrá comer". 

Canarias es otro ejemplo de que viven "una situación socioeconómica extrema", cuenta la delegada de Médicos del Mundo desde las islas. Y da un paso más porque está comprobando que hay mujeres que siguen ejerciendo por necesidad para cubrir el gasto mínimo del alquiler de la habitación en el prostíbulo o en un piso, alimentación, enviar dinero para la familia... pero otras "lo tendrán que hacer por obligación". Se refiere aquí a las que además son víctimas de trata "porque explotadas están todas". Si tienen documentación se la retiran, lo que impide que puedan moverse libremente. Suelen ser captadas bajo una presión familiar, haciendo ver que es lo mejor para todos. Al salir de sus casas no suelen saber que van a ejercer la prostitución, pero una vez llegan a destino es la única puerta que les ofrecen para pagar la gran deuda que han ido acumulando. Estas mujeres suelen tener un número mínimo de clientes de forma obligatoria y en estos días no pueden negarse mientras siga existiendo la demanda, que no ha cesado. 

En cuanto que la ONG encuentra un caso así activa un protocolo para denunciar dicha situación, pero no siempre da sus frutos porque lo primordial en este caso es que sea la mujer que están siendo prostituida la que ponga una denuncia en el plazo de 60 días después de ser rescatada. Dada su situación y el temor con el que viven pocas veces sucede. Encontrarse un caso así también se hace complicado ya que no suelen estar más de seis meses en un mismo lugar. Las mafias las mueven para evitar ser descubiertas. 

Llegan engañadas y la deuda que van generando cada día es descomunal. "Las mujeres de nacionalidad nigeriana pueden llegar a España con una deuda acumulada de 30.000 euros solo por venir". Para ellas cada día que pasa con cero ingresos hace que su deuda se multiplique.  Son presas del miedo muchas veces porque las amenazas son constantes y no solo a ellas, sino a su familia". Esta semana caía una banda internacional que presuntamente prostituía a mujeres en pisos de España y Rumanía. Siete mujeres fueron liberadas. Las víctimas, de nacionalidad rumana en este caso, eran captadas por miembros de la organización mediante el método 'lover boy', por el que eran falsamente enamoradas y embaucadas para ejercer la prostitución. La organización desmantelada captaba en zonas rurales de Rumanía a mujeres jóvenes que residían en entornos desestructurados, con un nivel bajo de educación y problemas económicos.

Mediante el método 'lover boy', miembros del grupo criminal conseguían establecer relaciones sentimentales con las mujeres captadas para luego, mediante el engaño, el chantaje emocional y las coacciones físicas y psíquicas, convencerlas para ejercer la prostitución en pisos que la organización alquilaba en Rumanía y España. Un miembro de la organización asentado en Málaga era el encargado de alquilar los pisos, en Granada y Sevilla principalmente, y de gestionar en Internet los servicios sexuales que ofrecían las mujeres. Los explotadores, para conseguir un mayor control, despojaban a las víctimas de su documentación y les administraban sustancias estupefacientes, y los beneficios que obtenían con esta actividad eran destinados a la adquisición y construcción de inmuebles en Rumanía, así como a la compra de vehículos de lujo.

Y mientras el Ministerio de Igualdad 'aparcó' la prostitución pese a que su titular Irene Montero y el vicepresidente Pablo Iglesias son abolicionistas, desde Médicos del Mundo solicitan que por ahora se las considere población vulnerable para que puedan adherirse a políticas públicas de apoyo económico y acceder a los diferentes sistemas de servicios sociales. La situación administrativa irregular de la mayoría de estas personas las deja fuera de recursos adoptados por el Gobierno, como la prohibición a las compañías suministradoras de cortar el agua, la luz y el gas a los hogares que en esta crisis no pueden sufragar el recibo. 

Mostrar comentarios