Talgo pone al Avril, su nuevo buque insignia, rumbo a Brasil

  • La empresa española de ferrocarriles Talgo pretende, al frente de un consorcio hispano-brasileño, llevar la alta velocidad a la mayor economía de América Latina con el impulso de su nuevo buque insignia, el recién presentado Avril.

Juan Palop

Berlín, 22 sep.- La empresa española de ferrocarriles Talgo pretende, al frente de un consorcio hispano-brasileño, llevar la alta velocidad a la mayor economía de América Latina con el impulso de su nuevo buque insignia, el recién presentado Avril.

El consorcio, con el apoyo explícito de la ministra española de Fomento, Ana Pastor, va a luchar por hacerse con el contrato -aún sin pliego publicado- para construir y operar una línea férrea de alta velocidad entre las ciudades de Sao Paulo y Río de Janeiro, que se estima en unos 3.500 millones de euros.

Las sensaciones al respecto de Carlos de Palacio, presidente de Talgo, son muy positivas, según reveló en un encuentro con periodistas en el marco de la feria especializada Innotrans, celebrada durante esta semana en Berlín.

Aseguró que un consorcio liderado por el dúo formado por Talgo y Renfe, como tecnólogo y operador, respectivamente, tiene "opciones serias" de hacerse con el importante contrato y la competencia, tan sólo, de un consorcio francés liderado por Alstom, "y quizá", de otro combinado japonés.

La semana pasada una delegación empresarial española se entrevistó con el responsable público del proyecto brasileño, que escuchó durante una hora y con "un interés muy grande" la propuesta española.

"Presentamos una oferta de muy alta calidad", recalcó De Palacio.

La apuesta española cuenta además con el respaldo explícito de la ministra Pastor, que en ese mismo encuentro en Berlín destacó que el dúo Talgo-Renfe es "una combinación con muchas posibilidades de ganar" el contrato brasileño.

El respaldo gubernamental se centraría, como en el caso del tren de alta velocidad a La Meca, en el aspecto financiero, ya que trabajaría para lograr los avales precisos para que arranque el proyecto.

Está previsto que el pliego de condiciones se publique el próximo 30 de octubre, dando el pistoletazo de salida al concurso público, y que el plazo para presentar las ofertas se cierre el 30 de abril del año que viene.

Con este proyecto, Talgo y Renfe aspiran a reeditar el éxito comercial y de imagen que supuso el logro, el año pasado, del contrato para construir y explotar la línea férrea de alta velocidad entre las ciudades saudíes de La Meca y Medina, por un montante superior a los 6.700 millones de euros.

La gran diferencia con el proyecto árabe es que en esta ocasión el gobierno brasileño quiere que empresas locales se integren en los consorcios y participen en la construcción del tren de alta velocidad.

Esto no quita, no obstante, para que otras empresas españolas del sector participen también en el consorcio, según De Palacio.

De ganar el contrato, Talgo pondrá en circulación por primera vez el Avril, su último tren de alta velocidad, todavía un prototipo en fase de validación y prueba que alcanza los 380 kilómetros por hora y puede acoger hasta a 600 pasajeros.

El Avril, una de las tres grandes primicias lanzadas esta semana en la feria InnoTrans, es una "evolución natural" de los últimos trenes de alta velocidad desarrollados por la compañía, de las series 250 y 350, en concreto, explicó en una entrevista a Efe Mario Oriol, adjunto a la presidencia de Talgo.

"Es un tren de muy alta velocidad y de máxima capacidad. La novedad en este tren está en haber desarrollado una caja ancha que permite añadir una fila (de asientos) adicional", aseguró Oriol.

Además, indicó el adjunto a la presidencia, el Avril incluye los "principios tecnológicos" habituales de la compañía, como la ligereza -al estar construido en aluminio- y la accesibilidad, pues cuenta con un piso bajo continuo.

Oriol explicó asimismo que Talgo va a aprovechar la muestra especializada de Berlín para "darle toda la promoción posible" al proyecto español para conectar con una línea de tren de alta velocidad las ciudades saudíes de Medina y La Meca.

"Nos sentimos muy orgullosos de poder llevar la alta velocidad a Arabia Saudí", agregó Oriol.

Mostrar comentarios