Las temperaturas gélidas no arruinan la vuelta a la rutina en el triángulo del frío

Las gélidas temperaturas no han interrumpido la rutina en el triángulo del frío, entre Molina de Aragón, Calamocha y Teruel, pese a haber alcanzado los 20 grados negativos en la pasada jornada y continuar en alerta roja por bajas temperaturas que podrían llegar esta madrugada a los 15 bajo cero. Es el día a día de cada invierno en un territorio más que acostumbrado a vivir bajo cero, como ha recordado a Efe Danae Bazán, propietaria del Antiguo Horno de Bello (Teruel), donde esta madrugada han registrado -17,3, ocho grados más de los -25,4 que marcaron la jornada anterior.

Las bajas temperaturas no han causado ningún problema de abastecimiento en su comercio, explica Bazán, ya que las quitanieves habían limpiado la nieve caída durante el fin de semana en las carreteras, y en esta ocasión el temporal Filomena ha sido más benévolo que Gloria. Relata que desde el comercio han intensificado el reparto a domicilio que realizan durante todo el año, con el objetivo de llevar alimentos a las personas mayores que no habían podido salir de su casa por culpa del hielo que todavía se acumula en las umbrías de Bello.

De hecho, ha sido el alcalde del municipio, Jaime Barrado, quien ha emitido un bando para que los vecinos salgan lo menos posible de sus domicilios y se ha comprometido a abastecer a cada uno de ellos con lo que necesiten, ya sean alimentos del supermercado o medicinas de la farmacia. A 20 kilómetros de allí, en Calamocha, han registrado esta madrugada la temperatura más gélida de la provincia de Teruel y la segunda del país, según la Aemet, con -18, apenas tres grados por encima de los -21,3 que los termómetros marcaron en la jornada previa, aunque lejos de los -30 que alcanzaron en 1963.

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Desde la Farmacia Calamocha, Juan Giménez ha reconocido que en los catorce años que llevaba viviendo en la localidad nunca antes había visto temperaturas tan frías, aunque ha alegado que en el establecimiento no habían tenido ningún problema. "Es un frío seco y aquí estamos acostumbrados, pero el problema es que llevamos así muchos días y la calefacción ya no da más de sí", ha precisado, añadiendo que las calles estaban limpias únicamente para el tránsito de vehículos, ya que las aceras seguían con nieve que se había convertido en hielo y los aparcamientos estaban intransitables.

Donde también han tenido problemas de acceso por culpa del hielo ha sido en el centro de salud de Santa Eulalia de Campo, donde la estación de la Aemet ha registrado la tercera temperatura más fría esta madrugada, con -17,8, seis grados por encima de los -23 que se alcanzaron en la jornada anterior. Los mayores problemas de circulación allí se han registrado en la vía de acceso a la localidad, por la carretera comarcal, convertida en "una auténtica pista de patinaje", según han concretado fuentes del consultorio médico, donde durante estos días se han multiplicado las caídas y los traumatismos.

También los sanitarios han tenido que hacer más salidas porque las personas mayores no pueden llegar hasta el centro de salud, teniendo en cuenta además que de este centro dependen otras localidades como Alba del Campo, Rodenas o Peracense. Teruel capital se ha situado como el quinto lugar más frío de país esta madrugada con -15,4, seis grados más de los -21 que se registraron en la jornada anterior, motivo por el que desde el Ayuntamiento han ofrecido alojamiento a las personas sin hogar en el albergue municipal hasta que remita el temporal, además de apoyo con psicólogos y trabajadores sociales.