Pekín.- Trece personas fallecieron hoy en una avalancha en la provincia de Gansu y varios miles tuvieron que ser evacuadas de emergencia cuando se desbordó un río en Shaanxi, en ambos casos en el norte de China, donde han comenzado a sufrir los efectos de las inundaciones en el país.
Un total de 15 trabajadores se vieron sorprendidos por una avalancha de rocas y barro ocurrida en la ciudad de Pingliang (Gansu, noroeste) esta madrugada, a las 01.40 hora local (17.40 horas GMT del viernes), informó la agencia oficial Xinhua.
Los servicios de rescate lograron desenterrar a los sepultados, pero sólo dos de ellos lograron sobrevivir.
Los fallecidos estaban trabajando en el drenaje del río que cruza el municipio cuando 3.000 metros cúbicos de piedras y barrio se les vinieron encima.
Por otro lado, varios miles de personas tuvieron que abandonar sus viviendas en Huayin (Shaanxi, norte), cuando el río Lufou se desbordó a su paso por la ciudad.
El cauce del río creció hasta superar los márgenes, dañados a causa de la fuerza del agua, que causó una brecha de 50 metros en sus muros.
Según datos oficiales de la Oficina Estatal de Control de Inundaciones y Sequía actualizados ayer, viernes, en lo que va de año las lluvias e inundaciones han provocado 742 muertos y 367 desaparecidos.
Los desastres, los peores desde hace doce años, han afectado a 28 provincias y más de 120 millones de personas.
El primer ministro, Wen Jiabao, realizó hoy un llamamiento a las autoridades provinciales y locales para que se preparen para "más inundaciones severas y desastres".
Wen aseguró que el país se encuentra en "el momento crucial" de la temporada de lluvias, ya que en esta época (entre finales de julio y principios de agosto) se concentran los días de mayor pluviometría del año.
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