Trinidad Jiménez minimiza la importancia de los abucheos en Hebrón

Jerusalén.- La ministra española de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha minimizado la importancia de los abucheos e improperios con los que hoy fue recibida por un grupo de colonos judíos en la ciudad cisjordana de Hebrón, bajo ocupación de Israel.

"Ha sido algo aislado. Tengo muchos y buenos amigos en Israel y no quiero elevar de categoría lo que es una anécdota. Israel es más que los insultos que han podido proferir algunos", afirmó la jefa de la diplomacia española a la prensa tras el incidente.

Trinidad Jiménez precisó que había tenido ocasión de hablar con algunos de los colonos judíos que le depararon ese recibimiento.

"Querían exponernos las razones por las que están allí", dijo.

Según fuentes diplomáticas españolas consultadas por Efe, un grupo de colonos judíos de Hebrón había transmitido ayer al consulado de Jerusalén, a través del Ejército de Israel, su deseo de que Jiménez les recibiera durante su visita a la ciudad.

El incidente tuvo lugar en las inmediaciones de la Tumba de los Patriarcas, que según la tradición alberga la tumba de Abraham.

Allí, los colonos mostraban pancartas en las que se podía leer, en castellano, inglés y hebreo, el lema: "Hace más de 500 años España echó a los judíos a Hebrón, la pregunta es si ahora nos quieren echar también de Hebrón".

Jiménez fue insultada por una decena de colonos que la tacharon de "antisemita", "nazi" y de "odiar a Israel".

La mayoría de los insultos fueron proferidos por hombres tocados con kipá o solideo que identifica a los judíos religiosos.

Tras los abucheos e insultos, Jimenez afirmó que "no pasa nada, todo el mundo es libre de expresar su opinión", y prosiguió su recorrido por la ciudad para visitar algunos proyectos de la cooperación española para rehabilitar el casco histórico de Hebrón.

Hebrón es la única ciudad cisjordana ocupada por Israel en cuyo interior residen colonos judíos; unos 600 colonos judíos residen en el casco antiguo de la ciudad rodeados por más de 130.000 palestinos, y son constantes las fricciones entre ambas comunidades.

El incidente se produjo en el segunda día de la primera visita de Jimenez a la región, donde ayer se entrevistó con el presidente israelí, Simon Peres, y hoy lo hará con el jefe del Gobierno de Israel, Benjamin Netanyahu, y el primer ministro palestino, Salam Fayad, además de visitar el Yad Vashem o Museo del Holocausto, donde rendirá homenaje a los judíos muertos en la II Guerra Mundial.