Brasil entrena en el Rose Bowl a la espera de Ecuador

A 24 horas de su debut en la Copa América Centenario, y con la incertumbre de si su capitán, el central Miranda, puede ser de la partida, Brasil pisó por primera vez la grama del estadio Rose Bowl de Pasadena este viernes, donde realizó un entrenamiento tan ligero como una caipiriña sin cachaça.

Brasil y Ecuador debutan el sábado en el Grupo B del torneo en un partido que iniciará a las 19H00 locales (02H00 GMT del domingo) y se jugará en el icónico Rose Bowl, donde precisamente la selección auriverde conquistó su cuarto título mundial en 1994.

Dadas las seis bajas que ha tenido Brasil previo al inicio del certamen, Dunga no hizo trabajar muy fuerte a sus 21 dirigidos, y según lo visto, puso mucho énfasis en jugadas a balón parado.

Cuestionado al respecto, el entrenador de Ecuador, el argentino-boliviano Gustavo Quinteros, se tomó con calma la información de espionaje que le pasó la prensa en la rueda de prensa en el estadio.

"Puede que aproveche las situaciones del juego para ponerlas en prácticas, o también que está practicando algo que debe corregir", apuntó Quinteros.

Mientras el estratega de la tricolor ecuatoriana hablaba sobre el estado de su selección, Brasil se familiarizaba con la grama del Rose Bowl, un estadio donde ha jugado en dos ocasiones anteriores.

La 'canarinha' realizó primero una sesión de acondicionamiento físico, antes de adentrarse en aspectos tácticos del partido del sábado.

La prensa no tuvo acceso a esta parte del entrenamiento.

Fuentes de la delegación brasileña confirmaron a la AFP que los reemplazantes Paulo Henrique Ganso (Sao Paulo) y Walace (Gremio), llamados para sustituir a Kaká y Luiz Gustavo, respectivamente, llegarán en las próximas horas para sumarse al equipo de Dunga.

Ganso debía llegar en la mañana del viernes, pero el vuelo se retrasó y el jugador arribará a las 23H00 locales (06H00 GMT del sábado).

Walace se incorporará al equipo directamente en Orlando, donde la tropa de Dunga jugará en la segunda fecha, el miércoles, contra Haití.

Quinteros prefirió dejar concentrados a sus muchachos en el hotel, reponiéndose de la sesión de entrenamiento matutino en la cancha del StubHub Center de Carson, sede del LA Galaxy, de la MLS.

El DT se ha quejado de las malas condiciones de las canchas donde ha entrenado su equipo, lo que llevó a la Federacion Ecuatoriana de Fútbol (FEF) a presentar una queja formal a los organizadores de la Copa América Centenario por las malas condiciones de trabajo que ha tenido su selección antes del debut.

En un comunicado que lleva la firma del presidente en ejercicio de la FEF, Carlos Villacís Naranjo, la delegación ecuatoriana protestó por la falta de entrega de bebidas de hidratación que sufrió el plantel el martes y el retraso en la entrega del miércoles, y por el mal estado del campo de entrenamiento del StubHub Center, que obligó a cancelar la práctica matinal del jueves.

"Presentamos nuestro más enérgico reclamo por el mal trato recibido", dice el comunicado firmado por Villacís Naranjo.

Por lo pronto, Quinteros prefirió dejar todo eso atrás y enfocarse en el partido del sábado.

"Trataremos de no cometer errores, porque ante este tipo de rivales, si le das posibilidades, no te perdonan", reconoció el entrenador argentino naturalizado boliviano.