Darly Zoqbi, la Diego Costa del balonmano español

Diego Costa se nacionalizó español para disputar el Mundial de fútbol de 2014 en su país natal, Brasil. Una historia que guarda similitudes con la de Darly Zoqbi, arquera de la selección española de balonmano, brasileña de nacimiento y nacionalizada también con la perspectiva de esta cita olímpica en Rio.

Este miércoles era un día especial para Darly, ya que España se medía a Brasil en el torneo olímpico. Las Guerreras españolas habían caído ante Noruega en el anterior partido y en esta ocasión Silvia Navarro fue la titular, dejando a Zoqbi apenas un minuto y medio en el partido, ganado por las europeas por 29-24.

Pero si Diego Costa se ganó las iras de la 'torcida' en repetidas ocasiones, en su caso el público no le reservó ningún trato especial. Ni abucheos, ni pancartas, ninguna diferencia con el resto.

"No tenía ningún miedo de que me pitaran. Si lo hicieran sería gente que no me conoce, ni conoce todo lo que he vivido con la camiseta de Brasil. Al revés, en cada partido viene gente a saludarme al final", explicó a la AFP al término del encuentro.

"Diego Costa tomó una decisión acertada. Si tenía más posibilidades de estar (en el Mundial) con España, entonces hizo bien. Más teniendo en cuenta lo gran jugador que es. En mi caso no es lo mismo porque yo había dejado la selección brasileña ya hacía unos años", apuntó.

Diego Costa apenas había jugado con la Seleçao, en dos amistosos, pero Darly Zoqbi sí que compitió al alto nivel y en grandes citas oficiales con Brasil, con la que ya había estado en dos Juegos Olímpicos, en Atenas en 2004 y en Pekín en 2008.

Estos son los terceros Juegos para la arquera nacida hace casi 34 años en Ponte Novo, en el estado de Minas Gerais, y empezó a destacar en el Mundial júnior de 2001, donde fue elegida la mejor de la competición.

Su debut con Brasil fue en 2002 en categoría absoluta y en los Juegos de Atenas-2004 tuvo su estreno olímpico, donde hizo un gran partido en cuartos de final contra Corea del Sur, aunque no pudo evitar la caída de su equipo, que acabó séptimo. Cuatro años después en Pekín-2008 también estuvo con la verdeamarilla, finalizando en novena posición.

"Viví con mucha intensidad Atenas y Pekín. Pero esto es especial, son unos Juegos en Brasil y es especial para mí. No nací en España, pero me siento totalmente en casa en el equipo español", aseguró.

El Mundial de China en 2009, donde Brasil quedó eliminado en la primera ronda, fue su última gran cita con el equipo sudamericano.

Pero para entonces llevaba ya siete años viviendo en Europa, donde ha desarrollado su carrera entre España y Francia.

A España llegó en 2002, al Murcia, y desde entonces ha jugado también en clubes de San Sebastián y Sagunto (cerca de Valencia).

"Mi familia española es enorme porque son todos mis amigos, toda la gente que conocí en el balonmano. Fue España la que me ha llevado al mejor nivel del balonmano mundial. Yo salí de Brasil con 18 años y me fui a España a jugar. Fue el Bera Bera de San Sebastián el que me hizo una jugadora conocida a nivel internacional", relató.

Pese a ser ya una veterana y el empuje de las nuevas generaciones, no piensa en la retirada e incluso se dispone a iniciar una nueva aventura, ya que ha fichado por el Buducnost montenegrino.