Daley Blind, sangre de victoria

Juan José Lahuerta

Madrid, 2 oct.- Daley Blind (9 de marzo de 1990), lateral izquierdo del Ajax de Amsterdam, se enfrentará al Real Madrid mañana con el peso de un apellido ilustre que durante finales de los 80 y en los años 90 tocó la gloria en el conjunto holandés. Daley Blind, hijo de Danny Blind, tiene sangre de victoria en sus venas.

Su padre fue uno de los pilares del Ajax que consiguió la Liga de Campeones en 1995 y es uno de los cinco jugadores que ha ganado todos los títulos internacionales de clubes reconocidos (aparte de la máxima competición continental, logró una Recopa, una UEFA, una Intercontinental y una Supercopa).

Un peso histórico que el joven Blind ha podido soportar para llegar desde las categorías inferiores del Ajax hasta el primer equipo. Pero ha tenido que esperar hasta esta temporada para lograr hacerse definitivamente con un hueco en el once titular de Ronald De Boer.

Desde su debut oficial, en el curso 2008/2009, ha participado en 49 partidos con el Ajax y sólo ha marcado un gol, de penalti al Celtic de Glasgow en Liga de Campeones. También pasó un año fuera de su casa. El Groningen le acogió durante toda la temporada 2009/10, desde donde regresó al Ajax para quedarse definitivamente.

Su estancia en el Groningen fue muy importante en su carrera. Allí disfrutó de los minutos que no tenía en su club de origen y en el año en el que estuvo cedido jugó casi una veintena de partidos en el once titular. Cuando regresó de la cesión, había cambiado.

Blind es el típico caso de hijo de futbolista cuya evolución es observada con lupa. Otros han pasado por la misma historia que a veces puede abrir puertas o convertirse en un lastre a lo largo una carrera profesional.

Hay muchos casos con diferentes finales. Paolo y Cesare Maldini, Adrián González y Míchel, Johan y Jordi Cruyff o los dos "Sanchís". El pasado puede pesar, pero a veces logra borrarse con una gran carrera.

Eso es lo que intenta Daley Blind desde su posición en uno de los laterales de la zaga. Es un jugador que todavía está en plena formación pero muestra detalles que invitan a ser optimistas con él. En un futbolista que sabe y hace jugar, sin miedo al balón y con un toque talentoso que invita a pensar que puede llegar a ser un jugador interesante.

Todavía tiene que crecer en el aspecto atacante, aquel en el que su padre fomentó con acierto a lo largo de su carrera y que le condujo a marcar goles importantes. Aún tiene mucho tiempo para mejorar y, de momento, mantiene el fuerte carácter de su progenitor. El club tiene intención de renovarle, su contrato acaba en 2013, pero anunció que hasta diciembre no se sentarán a negociar.

"Esto es decepcionante. No me han ofrecido un contrato hasta el momento, y me pregunto por qué no lo han hecho. Sin embargo, voy a esperar y ver qué pasa. Sin duda, si me lo ofrecen lo tendré en cuenta", declaró hace cerca de un mes a Nusport.

Marc Overmars, director deportivo del Ajax y ex jugador del Barcelona tendrá la última palabra. Daley Blind espera cerrar una larga carrera en el Ajax. Mientras, el Real Madrid pondrá bajo los focos a un defensor que tiene sangre de victoria. Unos genes que el conjunto blanco debería tener cuenta.