El Athletic despide San Mamés con una decepcionante y traumática temporada

  • El Athletic Club ha despedido al viejo y centenario San Mamés, que echará el telón el miércoles para dar paso a otro campo más grande y más moderno, con una decepcionante y traumática temporada, un segundo año con Marcelo Bielsa en el banquillo muy alejado al excitante e histórico primer curso con el singular técnico argentino al frente.

Ramón Orosa

Bilbao, 3 jun.- El Athletic Club ha despedido al viejo y centenario San Mamés, que echará el telón el miércoles para dar paso a otro campo más grande y más moderno, con una decepcionante y traumática temporada, un segundo año con Marcelo Bielsa en el banquillo muy alejado al excitante e histórico primer curso con el singular técnico argentino al frente.

Tras una fantástica campaña con dos finales y un fútbol que será recordado durante años en Bilbao, en este segundo curso del rosarino el Athletic no ha hecho más que sumar decepciones en medio de un ambiente enrarecido por la marcha, llevada a cabo o anunciada, de tres de los grandes baluartes rojiblancos en los últimos años, Javi Martínez, Fernando Llorente y Fernando Amorebieta.

El primero se fue a principios de temporada al Bayern de Múnich a cambio de 40 millones de euros y los dos 'fernandos' lo harán en los próximos días a la finalización de sus contratos y sin dejar ni una moneda en las arcas del club bilbaíno.

Por ahí, por esa marcha de la entidad de tres de sus jugadores estrella, se le ha ido el Athletic mucha fuerza esta temporada, en la que también ha sido asolado por las lesiones. Sobre todo al principio del curso.

La marcha del centrocampista internacional, central para Bielsa, dejó un tanto desguarnecida una defensa en la que Mikel San José no acaba de ofrecer el nivel esperado, Carlos Gurpegui penó unos meses debido al tiempo que llevaba sin jugar y que Borka Ekiza apuntaló aún sin ser un jugador del perfil que gusta al técnico argentino.

El caso de Llorente también ha mermado mucho a su equipo, pero más por cómo se lo ha tomado parte de una afición que ya no le tenía en demasiada estima y la ha tomado con él en cuanto ha podido.

En lo deportivo, Aritz Aduriz, sin duda una de las mejores gestiones de Josu Urrutia como presidente, ha paliado la ausencia en el once titular de ariete campeón del mundo con un total de 18 goles, 14 en Liga.

Traducidos a puntos, los tantos de Aduriz, sobre todo en la primera mitad del campeonato, le han evitado males muchos mayores que han amenazado a un Athletic que no respiró tranquilo hasta la ante penúltima jornada. Aunque, curiosamente, el último objetivo que ha podido plantearse ha sido el de obtener un billete europeo.

La falta de Amorebieta, al que el club retiró una primera oferta, la ha paliado la llegada al primer equipo del prometedor canterano francés Aymeric Laporte, lesionado en el tramo final del curso.

Los goles de Aduriz y el ascenso de Laporte, un central zurdo con alma de delantero, es de lo poco que puede echarse a la boca el Athletic en un año en el que quedó eliminado en una Fase de Grupos más que asequible en la que Liga Europa, cayó a las primeras de cambio ante un Segunda B -el Eibar- en la Copa del Rey y estuvo siempre en la parte baja de la tabla en el campeonato liguero, en el que ha terminado duodécimo.

Finalizada la temporada 2012-2013, y una vez despedido el viejo San Mamés este miércoles, el Athletic tendrá que empezar a clarificar el nuevo curso 2013-2014, en el parece que ya no estará Bielsa en el banquillo.

Ernesto Valverde apunta a nuevo técnico rojiblanco, ya sin Llorente y Amorebieta, que se marcharán a la Juventus italiana y el Fulham inglés, respectivamente.

Es casi seguro también que abandonarán el equipo Xabi Castillo e Igor Martínez, y entre los nombres que suenan para llegar están los de Beñat Etxebarria (Betis), Kike Sola (Osasuna), Mikel Balenziaga (Valladolid) y Xabi Etxeita (Elche).

Operaciones que se concretarán próximamente en un sentido u otro antes de volver en julio con ilusión renovada a la que será la primera temporada de la segunda mitad del mandato de Urrutia.

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