El proyecto del jeque se desinfla y deja al Málaga en una situación crítica

  • El proyecto inversor del jeque Abdullah Al-Thani en el Málaga se ha desinflado por los problemas económicos, justo en la temporada más importante de toda su historia, pues el equipo se ha visto abocado a una situación crítica precisamente cuando se prepara para disputará la previa de la 'Champions'.

Málaga, 12 ago.- El proyecto inversor del jeque Abdullah Al-Thani en el Málaga se ha desinflado por los problemas económicos, justo en la temporada más importante de toda su historia, pues el equipo se ha visto abocado a una situación crítica precisamente cuando se prepara para disputará la previa de la 'Champions'.

El colapso con el que ha comenzado el tercer proyecto del jeque catarí, propietario del club, se ha traducido en los traspasos de algunas de sus estrellas, como los del internacional Santi Cazorla al Arsenal inglés y del delantero venezolano José Salomón Rondón, su máximo artillero, al Rubín Kazán ruso, para intentar sufragar las graves pérdidas económicas del pasado ejercicio.

Al-Thani ha cambiado radicalmente sus planteamientos inversores iniciales en el Málaga, y en apenas un mes ha dado órdenes de no aportar más a la entidad, a la que ha puesto en el escaparate para una posible venta, dejando parte de su presupuesto (150 millones de euros) sin cubrir.

Este cambio contrasta con las aportaciones del las dos últimas campañas, un total de 135 millones de euros, que permitieron incorporar al conjunto a Santiago Cazorla, Jeremy Toulalan, Joaquín Sánchez, Isco, Ignacio Monreal, Sergio Sánchez, Joris Mathijsen, Diego Buonanotte y Ruud Van Nistelrooy.

La marcha atrás del jeque en la gestión, que ya antes había renqueado en el asunto de los pagos y, sobre todo, del incumplimiento de los plazos acordados en distintas operaciones, ha puesto al club en grave riesgo de desaparición, con deudas e impagos a jugadores, clubes, empleados y proveedores.

La que es, de partida, la temporada más importante en la historia del Málaga, pues disputará por primera vez, si la UEFA no lo impide, la fase previa de la Liga de Campeones, se ha tornado en desilusión e incredulidad por la decisión del jeque, que hasta ahora, y se pudo comprobar en el último choque de Liga ante el Sporting de Gijón, parecía muy comprometido con la entidad.

Actualmente, con la marcha de Cazorla y Rondón, más la posible del defensa holandés Joris Mathijsen al Feyenoord de su país y de algún jugador más que tiene una ficha prohibitiva en estos momentos, nadie sabe qué va a ocurrir, aunque los representantes del jeque piden tranquilidad y aseguran que todo regresará a la normalidad.

El club le comentó a los jugadores que tenían la posibilidad de abandonar la entidad si presentaban alguna oferta, debido a las altas fichas, como son los casos del central argentino Martín Demichelis, el lateral Ignacio Monreal o el centrocampista francés Jéremy Toulalan, entre otros.

También estaba en duda la continuidad del técnico chileno Manuel Pellegrini por su elevado salario, en un momento en el que la entidad afronta el comienzo del campeonato español y la previa de la Liga de Campeones, ante el Panithinaikos griego (22 y 28 de este mes).

Pero el pasado viernes, Pellegrini trató de enviar un mensaje de tranquilidad al declarar que su situación es clara: "permanecer y llevar al club en estos momentos difíciles".

Pellegrini añadió que los que menos le aleja del Málaga es "la parte económica" personal, mientras que lo que más le aleja son los incumplimientos salariales con los jugadores.

"El plantel llega tocado anímicamente", dijo el exentrenador del Real Madrid en alusión a que los jugadores llevan "muchos meses sin cobrar".

El Málaga espera que con lo recaudado por Cazorla y Rondón, unos 25 millones de euros en total, pueda abonar las deudas que tiene contraídas con el River Plate por el traspaso del delantero argentino Diego Buonanotte, ya que el club lo ha denunciado ante la FIFA.

Además, otro frente que tienen abierto los gestores malaguistas es intentar desbloquear los derechos federativos del club, pues en la actualidad los tiene suspendidos por los impagos al Villarreal -por el IVA del traspaso de Cazorla- y a Osasuna -por parte del de Monreal-, con lo que de momento no puede inscribir a ningún fichaje.

El club realiza gestiones para abonar parte de lo adeudado a técnicos, empleados y organismos públicos. También espera saldar determinadas deudas para poder incorporar a posibles fichajes.

La afición, con 27.000 socios, se mueve en el desconocimiento absoluto, mientras la incertidumbre sigue creciendo debido a que el jeque Al-Thani no ha hecho ninguna declaración pública sobre los motivos que le han llevado a frenar la inversión y a dejar al club es una situación crítica y complicada para el presente y el futuro.

Mostrar comentarios