Erick Barrondo: "Aquí pesó la localía"

Veracruz (México), 23 nov.- El guatemalteco Erick Barrondo, subcampeón olímpico, calificó hoy de injusta su eliminación en la marcha de 20 kilómetros de los Juegos Centroamericanos y del Caribe en la que su esposa ganó la prueba de mujeres.

"Uno se prepara para ganar, pero a los jueces cuesta convencerlos, aquí pesó la localía", dijo en una insinuación de que los árbitros favorecieron de manera deliberada al mexicano Horacio Nava por estar en su país.

Barrondo, uno de los mejores deportistas de América Latina, tomó la punta de la competencia al dejar atrás a Nava y al colombiano Eider Arévalo a un kilómetro de la meta, sin embargo le sacaron una tercera tarjeta y fue descalificado, lo cual también le pasó en la pasada Copa Mundial.

"Reconozco que con mi anterior entrenador mi técnica nunca fue buena, pero vengo de ganar cuatro competencias en Europa y terminé limpio, una muestra de que camino bien", señaló.

El competidor, cabeza de la delegación de Guatemala en los juegos, dijo tener el corazón partido con una mitad triste y otra llena de felicidad porque su mujer, Mirna Ortiz, se impuso con récord de los juegos de 1h35:43.

"Por ella sí estoy contento", comentó el atleta que sale como favorito para imponerse el próximo sábado en los 50 kilómetros.

Barrondo negó los rumores sobre su posible decisión de caminar solo 50 kilómetros para evitar amonestaciones por ser una prueba más lenta, y reiteró su afán de ser el mejor del mundo en las dos distancias.

"Voy a seguir marchando 20 y 50 porque mi propósito es ser el mejor del mundo en las dos pruebas; tengo una condición y un buen entrenador; hoy no me dejaron ganar, pero me queda una semana para recuperarme y buscar el oro en 50", concluyó.

Con la medalla de oro de Mirna Ortiz, Guatemala se consolidó en el quinto lugar de los juegos con 10 oros, 13 platas y 20 bronces, delante de República Dominicana y Puerto Rico, señaladas como favoritas para repartirse los lugares cinco y seis.

"Al país le hacía falta mi medalla de oro y me duele que no me dejaron dársela", reiteró.