España 0-1 Alemania: Kroos pone fin al récord de Del Bosque

Kroos dejó a España fría con un disparo en el minuto 88. Es lo que tienen los grandes jugadores. Aparecen en los momentos decisivos, cuando parece que todo está finalizado. Fue un disparo ajustado, que botó y cogió velocidad en un césped muy mojado. Despistó a Kiko Casilla, que había entrado por Casillas. Un palo para el debutante en la portería. Un gol de mal recuerdo que no hace justicia a los méritos y el esfuerzo de los de Del Bosque, que pierde por primera vez como local y se acaba una racha que duraba ocho años y 34 partidos sin perder.

El empate era lo más justo.Alemania se presentó al amistoso de Vigo con un motor nuevo. Varios de los caballos de potencia que hicieron a la máquina germana campeona del mundo no estuvieron presentes (Neuer, Lahm, Schweinsteiger, Özil…) y uno de los más fiables, el goleador Müller, se tuvo que retirar del campo por lesión en el minuto 22. Joachim Löw probó un nuevo tanque y lo aparcó atrás. El planteamiento fue conservador y sorprendentemente práctico por no decir rácano. Con Kedhira y Kroos retrasados, las líneas juntas y una defensa adelantada buscó contrarrestar el talento de España, robar la pelota y salir al contraataque con Götze y el sustituto de Müller, el delantero Bellarabi.

La calidad del juego de España también se vio perjudicada por el chaparrón de agua que cayó en Balaídos. Mucha lluvia y viento que deslucían el juego y no ayudaban al esfuerzo y la precisión del fútbol que propone España. Del Bosque apostó por mantener un cinturón de seguridad en el onde con Casillas, Piqué, Sergio Ramos y Busquets que le funcionó. En la primera parte fue mejor España, llevó la iniciativa del juego y el control. La práctica Alemania se plantó en un par de ocasiones en el área con peligro y, en una de ellas, se lució Casillas con una estirada a un disparo de Götze. Iker desvió la pelota con la mano derecha. Piqué también estuvo atento para ir al corte y desbaratar una internada con riesgo. Por delante de los más veteranos jugaron los más inexpertos. Isco volvió a ser la apuesta para organizar y construir el juego. Tuvo menos adornos, como le pide Del Bosque, que en el partido contra Bielorrusia. La dificultad era mayor, enfrente estaban dos rocas y tipos con oficio como Kroos y Khedira. No le dejaron tan suelto.

Morata y Nolito jugaron adelantados y con mucha movilidad por todo el frente de ataque para encontrar espacios. Nolito se fabricó una buena ocasión de gol, en una acción individual, con un disparo desde fuera del área que desvió el portero Zieler. Fue en el minuto 11. Seis minutos después tuvo otra aproximación de peligro Raúl García. Zieler se mostró, de nuevo, seguro. La tercera ocasión de peligro de España la protagonizó Isco con un disparo desde fuera del área, similar al golazo que metió a Bielorrusia, buscando la escuadra. En esta ocasión se le fue desviado.

Se llegó al descanso con algo más de brillo de la estrella de España que las cuatro que tienen los alemanes. Los de Del Bosque jugaron con más ganas, ilusión y personalidad. Del Bosque quitó a Sergio Ramos y Piqué para meter a Albiol y Bartra. Camacho entró por Busquets. La Roja empezó el segundo periodo con el mismo empuje y una arrancada de Isco la culminó Morata con un tiro centrado. Hay un cambio en el juego que pide el seleccionador. España es más directa, vertical y procura llegar más rápido al área rival. Alemania quiso dormir el partido, empezó a querer la pelota y buscó sorprender con acciones más explosivas. Los centros al área de Casillas le hicieron daño España, a la que le surgieron dudas y dio un paso atrás. Se quitó el dominio con una acción individual de Morata que desbarató Höwedes tirándose al suelo para cederla al portero. El partido entró en una fasse de más juego colectivo alemán contra las acciones individuales de Nolito y Morata.

Nolito provocó una falta que él mismo lanzó y Zieler desvió a córner una pelota que cogía dirección por la escuadra. En esta última media hora el partido podía caer de cualquier lado. España, más desgastada, sacó fuerzas de flaqueza con Isco llevando balones al área. Alemania buscaba las contras y Raúl García paró una de ellas sujetando a Bellarabi. Un minuto después fue Albiol el que se tiró al suelo para evitar una lanzamiento peligroso de Khedira. Era ya un encuentro sin dueño y roto. Ambos se creyeron que podían desequilibrar sus fuerzas, en un campo muy pesado por la intensa lluvia, y ganar era un triunfo moral y de prestigio. Del Bosque sacó a Callejón, a falta de veinte minutos, por Raúl García. También hizo debutar a Kiko Casilla por Casillas y entró Pedro por Nolito. Muchas caras nuevas en La Roja, que respondieron a la exigencia que es jugar ante una campeona del mundo. Pedro tuvo la mejor ocasión, a falta de nueve minutos, intentando una vaselina que desvió Zieler.