España dedica un saquito de goles al 'adivino' Hugo Chávez

"Temblad, os vamos a meter un saco de goles". Esta frase para la historia salió de los labios de Hugo Chávez en su programa 'Aló, presidente', en la televisión pública de Venezuela. Frase para la historia porque el dirigente venezolano demostró que las predicciones no son lo suyo. Al final, la arenga se volvió en su contra y el combinado Vinotinto fue derrotado por España.

No se había llegado al minuto 5 de partido y David Villa ya había marcado el primer gol de la selección de Vicente del Bosque. Fue gracias a un lanzamiento de falta lejano, pero envenenado por el viento, y que contó con la inestimable colaboración del portero local, Vega, situado detrás de la barrera y no protegiendo su poste. Con este tanto, el delantero asturiano se consolida como máximo goleador de la selección española con 47 dianas.

Poco después, Pedro Rodríguez marcó el segundo tanto con algo de fortuna. Tras una combinación entre Fernando Llorente, Villa y él mismo, recibió del Guaje y su disparo salió mordido para alojarse en el fondo de la portería. No se habían cumplido los primeros 20 minutos y el presidente de Venezuela, desde el palco, comprobaba lo erróneo de su vaticinio.

Antes del pitido del árbitro para ir a los vestuarios y tomar aire, Xabi Alonso, con otro lanzamiento de falta, acabó de sentenciar el partido. La culpa fue esta vez de la barrera, que se abrió. Sin mucho juego, pero con una gran efectividad, la selección española tenía la victoria en la mano. Un triunfo para engordar la estadística de La Roja e irse de vacaciones con la conciencia tranquila.

La arenga de la prensa, igual de desafortunada

El presidente Hugo Chávez no fue el único que quiso estimular a los jugadores del combinado nacional venezolano. El diario Líder, en su portada, lanzó este mensaje: "Denle en la madre... patria". Lucena y Chichero se lo tomaron al pie de la letra y en menos de 10 minutos vieron sendas tarjetas amarillas por entradas a Sergio Busquets y Xabi Alonso.

Al final, el partido disputado en el Estadio Olímpico General José Antonio Anzoátegui fue una fiesta, pero de la selección española. Venezuela hizo de perfecto anfitrión pero no pudo dar una alegría a sus aficionados. La derrota fue excesiva por lo visto en el campo, pero al final lo que cuentan son los goles y éstos, mal que le pese a Chávez, los marcaron los hombres del Marqués Del Bosque.