Guardiola no renuncia a sus principios en el Barcelona-Atlético

  • Pep Guardiola salió el pasado miércoles con un 3-4-3 a jugar en Mestalla. Aunque tuvo que reaccionar a mitad de partido ya que Emery supo contrarrestar perfectamente el sistema azulgrana, ante el Atlético repitió su apuesta. Y funcionó.
El Barcelona-Atlético Madrid, en fotos
El Barcelona-Atlético Madrid, en fotos
lainformacion.com
Óscar Rodríguez

No se puede ser más ofensivo que este Barcelona. Guardiola puso en liza el 3-4-3 de Mestalla con todo el arsenal que tiene en su plantilla: Mascherano como único central, un centro del campo con Busquets como único jugador defensivo, acompañado de Thiago, Xavi y Cesc; y tres delanteros, Villa, Messi y Pedro buscando la portería rival. Para dar miedo.

Y no defraudó. Porque Emery colocó sus piezas en Mestalla para buscar la espalda de los laterales una y otra vez (sobre todo con Mathieu por la banda de Alves), pero para poder hacer eso hay que tener la posesión del balón. Y el Atlético, en el Camp Nou, no la olió.

El equipo de Gregorio Manzano se pareció enormemente al Villarreal de la primera jornada (5-0) o al Osasuna de la tercera (8-0). Se llevó cinco goles, aunque pudieron ser más de no ser por la actuación de Courtois. Mal partido del equipo menos goleado del campeonato hasta el momento.

El despliegue ofensivo azulgrana, comandado por un gran Messi, destrozó la defensa rojiblanca. Cuando no era uno era otro y sino Miranda se hacía el segundo en propia meta. Antes Villa había abierto el marcador y después Messi lo redondeó con un hat-trick. Pero Cesc lanzó al larguero, Thiago rozando el palo, Xavi junto al poste... Un vendaval.

Guardiola no se vino abajo porque no le saliera su apuesta la pasada jornada. Eso sí, habrá que ver si lo repite cuando visite el Bernabéu, el Pizjuán o alguno de los estadios complicados de la Liga. Ésa será otra historia.

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