Los trabajos del combinado "cafetero" tuvieron lugar en el estadio Luis Franzini de la costa de la capital uruguaya, con un clima frío y ventoso lejos de una primavera ideal para muchos de los colombianos, y bajo la mirada atenta del DT argentino José Pekerman, quien supervisaba en campo las órdenes firmes y continuas de sus asistentes.
Hubo coincidencia en el respeto por Uruguay y aviso de precaución con su garra, fuerza y juego aéreo, pero los colombianos advirtieron que el martes buscarán el triunfo en este "difícil" choque, a disputarse en el mítico estadio Centenario.
Los últimos datos indicaban que hasta el sábado se habían vendido unos 12.000 boletos.
Pekerman dispuso que una parte de los movimientos fueran a puerta cerrada y luego fue liberado el acceso a la prensa durante unos 20 minutos para permitir el contacto con algunos jugadores.
Durante los trabajos que se pudieron ver, los porteros practicaron salidas en pelotas quietas desde las bandas, mientras los jugadores realizaron tareas en las que varios se colocaban junto a un panel simbolizando un rival y debían tocar el balón rápidamente de primera a un compañero y se generaba una rotación continua.
Titulares y suplentes mezclados protagonizaron posteriormente un partido en una mitad del campo con dimensiones reducidas, poniendo énfasis en salidas rápidas y triangulaciones para evadir marcas.
Se pudo notar que la preocupación principal colombiana está en las jugadas de pelota quieta -sobretodo en el juego aéreo- y la marca a presión de Uruguay, que tiene un mediocampo dinámico y fuerte que hace gala de la mejor tradición de la garra charrúa, como lo reconocieron varios futbolistas visitantes.
"Es el equipo más fuerte de la eliminatoria en pelota quieta y sabemos que siempre van a luchar hasta el final", aseguró el defensa Cristian Zapata (Milan/Italia). "Estamos preparados para lo que es el juego fuerte de Uruguay....acá hay que jugar lo más rápido posible", dijo a la AFP.
Los colombianos alabaron a Uruguay por su victoria 2-0 ante Bolivia en La Paz y el peligro derivado de su juego aéreo, aunque se manifestaron optimistas.
"Vinimos por los tres puntos", sentenció Zapata, quien también se refirió a la ausencia de la máxima estrella uruguaya, el ariete Luis Suárez -suspendido al igual que su compañero Edinson Cavani-: "sabemos que Suárez es referencia de la selección de Uruguay, saber que no está y es una ventaja....igual hay que estar muy atentos".
El volante Edwin Cardona, autor de un gol en el 2-0 contra Perú del jueves pasado, alabó también a Uruguay aunque remarcó que el objetivo visitante es la victoria. "Nosotros vinimos acá por los tres puntos", afirmó.
A su vez, el mediocampista del Inter italiano Freddy Guarín destacó como virtudes uruguayas la "fuerza (física y mental) y el juego aéreo", pero aclaró que "Colombia donde vaya va a ir a ganar".
Al Franzini se arrimaron cerca de 15 hinchas colombianos para alentar a los jugadores de su selección, varios de ellos con camisetas del equipo.
"Colombia va a ganar: 2-0. Uruguay tiene buenos jugadores, pero Colombia viene mejor...creo que podemos pelear para ser primeros en la eliminatorias", declaró a la AFP Juan José Valencia (13), un joven hincha cafetero mientras lucía la firma fresca del atacante Teo Ramírez en su camiseta.
llu/dg
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