Mitroglou impone su ley en Grecia y Croacia no pasa del empate

La selección de Grecia ha dado un paso importante hacia el Mundial de 2014, que se disputará en Brasil, tras superar a Rumanía por 3-1 en el encuentro de ida de la repesca de la zona europea, en una noche en la que Islandia y Croacia empataron sin goles.

Los griegos tuvieron en Konstantinos Mitroglou a su hombre clave. El delantero del Olympiacos hizo dos tantos, el primero y el último del duelo, para acercar a su país a la cita mundialista, ante una Rumanía que se vio sorprendida por la efectividad en ataque de los locales.

Y es que los pupilos de Fernando Santos, con problemas para hacer goles en la fase de clasificación, hicieron dos en los primeros veinte minutos de partido. Mitroglou abrió la cuenta a los catorce minutos, pero sólo cuatro después Stancu cabeceó a la red el empate. Sin embargo la alegría le duró un pestañeo a los rumanos, que vieron cómo Salpingidis devolvía el mando a Grecia de inmediato.

Con el marcador a favor, los locales supieron gestionar el partido y la falta de ambición de Rumanía, consciente de lo vital del encuentro de vuelta. Sin embargo Mitroglou volvió a aparecer para golpear de nuevo a los de Victor Piturca mediada la segunda mitad, poniendo un 3-1 que ya no se movió y que obligará a los rumanos, que acabaron con diez jugadores, a una brillante noche en casa si quieren obtener su billete para la cita de Brasil.

Por otro lado, Islandia y Croacia empataron sin goles en el estadio de Laugardalsvollur, en un encuentro en el que los croatas, teóricos favoritos, no fueron capaces de perforar la defensa local incluso a pesar de gozar de superioridad numérica casi toda la segunda parte.

Y es que el conjunto de Lars Lagerback vio cómo la roja directa a Skulason, por interrumpir como último hombre la carrera de Pericic, complicó el sueño islandés a los 50 minutos de juego. Sin embargo el conjunto dirigido por el debutante Niko Kovac no encontró clarividencia en los metros finales ante el enorme despliegue físico islandés y aparcó la resolución a la vuelta.

Con Modric y Rakitic lejos de su plenitud, fue Pericic el jugador que más peligro creó para Croacia. Un remate suyo en el minuto 86, tras una soberbia dejada de cabeza de Mandzukic, fue la mejor ocasión de un partido que no deja insatisfecha a Islandia, a la que un empate con goles el próximo martes en Zagreb le llevaría al sueño mundialista por primera vez en su historia.