Óscar Freire, el hombre del maillot arco iris

  • El ciclista cántabro, Óscar Freire, puede superar en Australia acorredores como Eddy Merckx, Rik van Steenbergen o Alfredo Binda, quecuentan, como el español, con tres títulos mundiales en su palmarés.
Óscar Freire, el hombre del maillot arco iris
Óscar Freire, el hombre del maillot arco iris
Getty
N. Díaz

Allá por 1998 se presentó en sociedad un ciclista de Torrelavega formando parte del Vitalicio Seguros. Freire, un chaval de apenas 22 años, tan solo iba a tardar una temporada en alcanzar la gloria. Lugar: Verona. Carrera: Mundial. El por aquel entonces seleccionador, Paco Antequera, hizo oídos sordos a las críticas de la prensa y convocó al cántabro, a pesar de completar un año repleto de lesiones.

Tras más de seis horas de pedaladas por carreteras italianas, el grupo de los favoritos, con un desconocido Freire en él, entró en el último kilómetro. Al lado del español, gente de la talla de Oscar Camenzind, Francesco Casagrande o el malogrado Frank Vandenbroucke, los mejores de la época en este tipo de competición. A 500 metros, cuando se preparaba la "volata", Freire decidió atacar de lejos por el lado contrario. Nadie se puse de acuerdo y el de Torrelavega tuvo tiempo para entrar con los brazos en alto. Comenzaba su idilio con los Mundiales. Y con Verona.

Y con el maillot arco iris que lleva durante un año el ganador de la medalla de oro. Su fama de despistado fuera de competición le ha acompañado toda su carrera. Todo lo contrario a cuando está encima de la bicicleta, donde brilla por su inteligencia y colocación. Eso le ha llevado a hacer historia. Apenas dos años después de reinar en Italia, lo hizo en Lisboa. Espectacular. Nunca un español lo había conseguido dos veces. Y se repitió una campaña nefasta marcada por la inactividad.

Por aquel entonces, Freire ya había firmado un contrato de oro por el Mapei- Quick Step, asombrado por la victoria del cántabro en Verona. Dos años más tarde, tras la desaparición de los italianos, se iría al Rabobank, su actual equipo. A Óscar le daba igual cobrar 100 kilos por temporada y seguía con un antiguo Opel Corsa, mientras compañeros de escuadra le hablaban de Ferraris. No le importaba.

Cinco años después de dar a conocer al mundo del ciclismo, el de Torrelavega volvió a Verona. Más maduro, con más kilómetros sobre sus piernas y con dos títulos mundiales en su palmarés. Freire podía entrar en la historia. Y lo hizo. El español igualaba así a Eddy Merckx, Alfredo Binda y Rik van Steenbergen con tres campeonatos del mundo. Era el quinto para España. Los otros dos fueron obra de Abraham Olano e Igor Astarloa. Freire lloró en el podio.

Y llega Australia. Y algo similar a los dos primeros Mundiales. La actual temporada ha sido bastante mala para Óscar, aunque en la Vuelta a España ha intentado ponerse en forma para la cita. Sus compañeros de selección le ven bien, más fuerte que nunca. Además, Freire sale como líder y tendrá al equipo trabajando para él. Por delante, más de 250 kilómetros. Al final, convertirse en el ciclista con más títulos mundiales. Apuesten por ello. Es el hombre del maillot arco iris.

 

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