Quico Taronjí:"Sé que habrá momentos muy duros, lloraré y pasaré mucho miedo"

Cádiz, 23 ago.- El santanderino Quico Taronjí ha reconocido que pasará "momentos muy duros", llorará y pasará "mucho miedo" en la travesía que le llevará desde Sotogrande, en San Roque (Cádiz), a Estambul (Turquía) a bordo de un kayak trimarán de 5,5 metros de eslora que funciona, sin motor, a pedales, remo o vela.

Taronjí, periodista de profesión, que ha trabajado, entre otros programas y distintas empresas, en 'España Directo' (TVE), intentará plasmar, a partir del próximo lunes, el récord del mundo de distancia en mar abierto a bordo de esta clase de embarcación sin barco de apoyo.

Surcará el Mediterráneo en un kayak convencional modelo Tandem Island de la empresa Hobie Cat, navegando algo más de 2.100 millas náuticas -casi 4.000 kilómetros- y pasando por seis países: España, Italia, Túnez, Malta, Grecia y finalmente Turquía.

Hasta el momento, la mayor distancia recorrida con una embarcación de este tipo ha supuesto navegar junto a la costa este de Estados Unidos.

Un viaje en solitario que no está exento de peligros, ya que Taronjí estará expuesto constantemente a la intemperie al viajar a bordo de un kayak sin cabinas y a las condiciones climáticas, al navegar a ras de agua.

Además, la fauna marina también presenta peligros, ya que en el Mediterráneo abundan ballenas, delfines y tiburones que le pueden hacer volcar la embarcación.

"Aunque sólo sea jugando, te mete un cabezazo una orca o una ballena en la embarcación y te manda a tomar por saco", ha destacado el aventurero en una entrevista concedida a Efe.

El santanderino tiene previsto tardar tres meses en realizar este reto, en el que estará apoyado desde tierra por el "mejor club del mundo de navegación de Hobie", el canario Abisal12.

"Conocen la embarcación como si la hubieran diseñado ellos", destaca Taronjí, quien resalta que su reto "les pareció un desafío".

"Me dijeron: tú vas a ser Fernando Alonso y nosotros tu equipo Ferrari en tierra. Cualquier rotura, avería o incidencia la comunico y ellos en tierra intentarán la mejor solución, mientras yo hago lo que puedo en el mar. Yo no tenía equipo, me iba a lanzar solo. Es un apoyo", ha destacado.

Taronjí pretende revivir las aventuras de los navegantes de siglos pasados. Deberá mezclar el agua dulce que portará con la salada de mar, pescar, comer algas, caracoles, moluscos o plancton.

"No tengo cocina, tendré que calentar la comida con papel de plata. Tengo que secar el pescado como se hacía hace siglos. Y cuando llueva cogeré el agua de lluvia. Es un juego de supervivencia", ha destacado.

Para llevar el menor peso posible a bordo, sólo viaja con frutos secos, miel y 'regañás', que están fabricadas "como las galletas que comían los marinos en los siglos XV y XVI, con poca agua en la cocción para que luego a bordo no aparezca el moho".

A la hora de dormir, llevará una camilla que "ataré sobre los brazos de carbono del barco con una especie de capucha para protegerme del rocío", ha relatado.

"Paro la embarcación y duermo durante doce o trece minutos, me despierto y miro a ver si todo está en calma, que no venga un mercante hacia mí, y vuelvo a dormir, así varias veces para intentar dormir unas seis horas cada día", ha explicado.

Para afrontar este reto, "he vendido todo lo que tenía, mi coche, mi piragua, cosas de valor y no he vendido la casa porque no tenía", ha asegurado el periodista aventurero.

Sus patrocinadores son la Ciudad de Melilla, Club Marítimo de Sotogrande, Rapada y Hobie Cat, "que pone la embarcación y me ofrece material", ha señalado Taronjí, quien ha agradecido el apoyo que le han prestado para que pueda hacer realidad este proyecto.

Este aventurero tiene como ídolos al capitán Cook, Núñez de Balboa, Juan Sebastián Elcano, Vasco de Gama "y gente así", en alusión a estos históricos marineros.

Quico Taronjí ha considerado que su reto es "un poco primitivo" y que por eso le "atrae" y ha apuntado que su intento de récord puede seguirse en el blog 'Aislado' y también por 'twitter'.