El vicepresidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos y Vecinas de Barcelona (Favb), Joan María Soler, ha defendido este jueves la conexión del tranvía por la Diagonal y ha pedido al Gobierno municipal que reprima el uso del coche en la capital catalana.
"Por mucho transporte público que haya la gente prefiere el vehículo privado porque es su burbuja", ha defendido en la segunda sesión de la comisión de estudio de la conectividad de transporte público en la Diagonal, y ha insistido en que el tranvía es el transporte público más económico en explotación y un 47% más barato que el bus.
Asimismo, Soler ha afirmado que las dinámicas de conexión de la Diagonal y su entorno "se verán reforzadas" por el tranvía, aunque también ha criticado al Gobierno municipal por no incluir la conexión del tranvía por esta avenida en el proyecto de la nueva trama de autobuses.
Lo ha dicho después de la intervención del director de Modelo Urbano del Ayuntamiento de Barcelona, Ton Salvadó, en la que ha explicado el proyecto del consistorio para la avenida: "450.00 habitantes se beneficiarían de la unión del tranvía y a 280.000 residentes del entorno de la Diagonal", ha asegurado.
REPENSAR LA DIAGONAL
El exarquitecto jefe del Ayuntamiento de Barcelona Oriol Clos ha asegurado que este la Diagonal necesita repensarse: "Está erosionada, más triste, asfáltica y deplorable", y, aunque ha dicho que el proyecto del tranvía podría encajar en la avenida, ha advertido de que su reestructuración no debe depender de la conexión.
"El tranvía es una idea muy simple y perfectamente compatible pero no es una condición para que se cumpla la reestructuración de la Diagonal", ha aseverado, y ha insistido en no perder la dimensión de la continuidad de la avenida ni su imagen propia.
El exingeniero jefe del Ayuntamiento de Barcelona Josep Acebillo se ha mostrado en contra de la conexión del tranvía: "El tranvía no es compatible", y ha observado que le parece obsceno, en sus palabras, relacionar el tranvía con mejoras en la salud y con la electrificación, y ha apostado por adaptar la Diagonal a la movilidad innovadora.
La teniente de alcalde de Movilidad de Barcelona, Janet Sanz, ha asegurado que el objetivo del consistorio es dar respuesta a los problemas actuales de la avenida y de los que vendrán en el futuro, y el concejal del PSC Daniel Mòdol ha dicho que el gran reto del proyecto es que no sea sólo una intervención en el tranvía, y ha calificado de "pésima" la intervención del anterior gobierno de CiU en la avenida.
OPOSICIÓN
La concejal del grupo Demòcrata Francina Vila --cuyo grupo impulsó la creación de esta comisión-- ha criticado que los informes no profundizan en el impacto de la infraestructura en el entramado urbano y que el espacio que ocuparía el tranvía iría en detrimento de destinado a los peatones, a lo que ha añadido: "Es un medio de transporte propio del siglo XIX o del XX".
Koldo Blanco (Cs) ha destacado que la ciudad tiene problemas de contaminación pero ha replicado al Gobierno municipal que plantea un contexto apocalíptico, y el republicano Jordi Coronas ha criticado que el debate de la movilidad se reduzca a estudiar si unir el tranvía: "Se acabe haciendo o no, será un remedio pequeño para todos los problemas que tenemos en la ciudad".
El popular Javier Mulleras ha pedido otras medidas para reducir la contaminación como promover el vehículo eléctrico, el Metro y espacios verdes, que requieren más trabajadores para ofrecer un mejor servicio, según Maria José Lecha (CUP), mientras que el concejal no adscrito, Gerard Ardanuy (Demòcrates), ha pedido trabajar para que la Diagonal "deje de ser una autopista".
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