LA OCDE MEJORA SU PREVISIÓN PARA ESPAÑA Y ESTIMA QUE EL PIB CREZCA UN 2,8% EN 2017 Y UN 2,4% EN 2018

- Advierte de que un Gobierno en minoría puede encontrar “dificultades” para impulsar reformas. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) estima que la economía española crecerá un 2,8% en 2017 y un 2,4% en 2018, con lo que mejora en tres y dos décimas, respectivamente, sus anteriores estimaciones.
En su último informe económico sobre España, la organización señala que la recuperación se mantendrá “robusta” en 2017 y 2018, impulsada por la demanda interna y apoyada en los bajos tipos de interés, la “fuerte” creación de empleo y una perspectiva exterior “positiva”.
Sin embargo, precisa que la recuperación se producirá a un ritmo “moderado” por el crecimiento “más débil de lo proyectado en Europa” y por “nuevas turbulencias financieras” en los mercados internacionales.
En el ámbito nacional, constata que en el primer trimestre se produjo un aumento “temporal” de la inflación por el incremento de los precios de la energía que afectó negativamente al consumo privado, pero el empleo y la confianza del consumidor se fortalecieron.
Las reformas estructurales, indica, “han contribuido a mejorar la competitividad y a fortalecer el crecimiento del empleo, pero son necesarias políticas en el mercado laboral más efectivas y de recualificación para reducir más el desempleo”.
En este sentido, considera que disminuir la dualidad en el mercado laboral y mejorar la formación mantendría a los trabajadores adaptados a los cambios que requiere el mercado.
La OCDE también cree que España podría obtener más beneficios de la globalización reduciendo barreras en los mercados de productos e impulsando una inversión más elevada en I+D+i.
No obstante, subraya que “un Gobierno minoritario podría enfrentar dificultades” para impulsar la agenda de reformas, lo que resultaría en un “crecimiento más débil”.
Por otra parte, la OCDE reconoce que si bien el ratio de deuda pública sobre el PIB ha ido descendiendo, “todavía permanece elevado”, por lo que “el Gobierno debería mantener el proceso de consolidación a medio plazo para asegurar un ratio de deuda sobre PIB gradualmente decreciente”.
En este sentido, añade que “dada la elevada deuda pública, el Gobierno debería atenerse a los objetivos fiscales” para continuar con la reducción del endeudamiento. De esta manera, se aseguraría un crecimiento “sostenible e inclusivo”.
Asimismo, el organismo internacional estima que la continuidad de la “fuerte” creación de empleo y un aumento “gradual” de los salarios seguirán impulsando el consumo, y que el crecimiento de las exportaciones se mantendrá.