México cree en solidez de instituciones brasileñas para resolver crisis

México considera que las instituciones de Brasil son "suficientemente sólidas" para resolver la crisis política que derivó en la suspensión de la presidenta Dilma Rousseff, dijo a la AFP la subsecretaria para América Latina y el Caribe de la cancillería mexicana, Socorro Flores.

México y Brasil, las dos economías más grandes de América Latina, comparten "una relación muy sólida, muy estrecha" por lo que el gobierno mexicano le está dando un cercano "seguimiento a los acontecimientos" del gigante del sur, dijo Flores en una breve entrevista telefónica.

"Creemos que las instituciones de ese país son lo suficientemente sólidas para poder resolver la situación por la que están atravesando los brasileños", añadió la funcionaria.

La mandataria brasileña fue separada temporalmente este jueves de su cargo y sustituida por el vicepresidente Michel Temer por un periodo de hasta 180 días, después de que el Senado determinara someterla a un juicio político.

Ambos países tienen "una serie de acuerdos" que seguirán en marcha "en conformidad con los compromisos que ya hemos adquirido los dos" países, sostuvo Flores que recordó la visita de la presidenta Rousseff en mayo del año pasado como muestra de esa cordial relación diplomática.

Durante esa visita Rousseff y el presidente de México, Enrique Peña Nieto, se comprometieron a ampliar el universo de preferencias arancelarias a través de la ampliación del Acuerdo de Complementación Económica: ACE 53, para favorecer a nuevos sectores como el de servicios, comercio electrónico, compras gubernamentales, propiedad intelectual y otros.

Además se firmó un acuerdo de cooperación y facilitación de inversiones, el primero que Brasil firma con un país de la región.

Los dos países renovaron en marzo de 2014 un acuerdo comercial con el que se restringió el intercambio bilateral de automóviles para proteger a la industria automotriz brasileña.

El acuerdo extendió un pacto bilateral promovido en 2012 por Brasil, que inicialmente causó irritación a la parte mexicana.

El comercio entre ambos países se ha incrementado un 475% en las últimas dos décadas y en 2014 superó los 9.000 millones de dólares.

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