Aguirre y rudi proponen devolver competencias al estado para que funcionen mejor

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y la futura presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, coincidieron hoy en una conferencia organizada por la Fundación FAES de José María Aznar en la conveniencia de que los gobiernos autonómicos devuelvan algunas competencias al Estado para que funcionen mejor.
Aguirre y Rudi lanzaron esta propuesta en Navacerrada (Madrid), donde la fundación que preside Aznar celebra este mes de julio la octava edición del Campus FAES, los cursos de verano de esta organización ideológica del Partido Popular.
Ambas estaban invitadas para analizar la evolución que ha experimentado el Estado de las Autonomías en España y comentar los peligros que corre. Desde el primer momento, Aguirre reconoció que el sistema “necesita una profunda revisión” a la vista de las “disfunciones” y del número de entes a que ha dado lugar, con parlamentos, gobiernos y consejos asesores en todas las comunidades.
La presidenta madrileña denunció que España “es un país que de facto, de hecho, funciona como un estado federal pero no lo es”, lo que hace que sufra “todas las desventajas de un estado federal pero carece de sus ventajas”.
Siendo optimista, apuntó que la crisis económica “ha servido para destapar tantas cosas que no funcionan” y sacar a relucir “algunas disfunciones” de las autonomías. En su opinión, de ahí pueden extrarse algunas lecciones para las reformas que convendrían hacerse.
Aguirre matizó que no pretende “una enmienda a la totalidad” del estado de las autonomías pero sí se mostró a favor de algunas como “la restauranción del consenso institucional o el consenso entre los dos grandes partidos”.
“Si ese consenso no se restaura, continuará la carrera más desenfrenada, seguiremos modificando estatutos que cada vez se parecen más a constituciones de pequeños estados y el Estado pasará a ser una sierva de las comunidades”, comentó. Aguirre apuntó que España “a veces parece la decimoctava comunidad”, tras las 17 autonomías existentes en la actualidad.
Desde el consenso entre las dos principales fuerzas políticas, manifestó que sería posible “alcanzar acuerdos para reducir burocracias, delimitar de una vez por todas las competencias para evitar duplicaciones, reforzar las conferencias sectoriales, devolver al estado algunas competencias para que algunos servicios funcionen mejor y afrontar reformas constitucionales para cerrar” el modelo de Estado.
Por su parte, la presidenta del PP de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, abogó por “poner algún límite” al Estado de las Autonomías, incluyendo la posibilidad de devolver competencias al Gobierno central que ahora ejercen las comunidades.
Aseveró que “hay determinadas decisiones que no es conveniente que se tomen por gobiernos demasiado cercanos”, aunque no concretó a qué tipo de competencias se refería exactamente porque consideraba que se la estaba entendiendo “perfectamemte”.
Rudi criticó el “exceso de normativa autonómica” y el “déficit desaforado” de las comunidades, que se ha puesto de manifiesto durante la actual crisis económica. No obstante, culpó de ella a “la locura irresponsable de Zapatero”.
Criticó que el presidente del Gobierno empezó la crisis gastando “sin tino pensando que iba a terminar pronto y que, gastando mucho dinero, podía evitar que la sensación de crisis llegase a muchos ciudadanos”. La consecuencia, lamentó, es que metió a España “en un callejón sin salida hasta que la UE le obligó a modificar” su política en el Consejo Europeo de mayo de 2010.
Finalmente, Rudi insistió en la necesidad de “adelgazar todas las administraciones” públicas y, en especial, de atribuir una “clara de competencias” entre gobiernos para que cada uno sepa exactamente qué es lo que tiene que hacer.