París, 21 jun.- La compañía francesa Air France presenta hoy un nuevo salón para los pasajeros de la clase preferente dentro de una ampliación de la terminal 2 del aeropuerto Charles de Gaulle de París el mismo día en que precisa a los sindicatos su plan de recorte de plantilla dentro del programa de ajuste.
El presidente de Air France, Alexandre de Juniac, inaugurará esta tarde el salón ejecutivo de 3.000 metros cuadrados con capacidad para 620 personas que empezará a funcionar a partir del próximo día 28 dentro del nuevo satélite 4 de la terminal 2 de Charles de Gaulle, junto a su homólogo de Aeropuertos de París, Pierre Graff, informó la empresa.
El objetivo de esas instalaciones es contribuir a la subida en gama de la aerolínea francesa, uno de los dispositivos de Juniac para sacarla del bache financiero que atraviesa, junto al recorte de costos de 2.000 millones de euros en el horizonte de 2015, según las cifras barajadas por la prensa en las últimas semanas.
El nuevo salón propondrá una nutrida oferta para comer, masajes o cuidados estéticos gratuitos, tabletas con conexión wifi y todo ello en un ambiente de lujo a la francesa para intentar remontar en la clasificación de compañías con mejor clase preferente, en la que desde hace años no aparece en cabeza.
De Juniac puso el acento en que se trata de poner el servicio de Air France "al nivel de los mejores".
Aparte de esta iniciativa, de un costo de 13 millones de euros, Air France tiene un plan de inversión global de cerca de 600 millones para subir en gama sus prestaciones, lo que pasa entre otras cosas por equipar las clases primera y preferente con asientos convertibles en camas totalmente planas en los aviones Boeing 777 y Airbus A380.
Cada uno de los 2.000 asientos de esos dos modelos tienen un precio superior a los 50.000 euros y la renovación debe iniciarse en 2013 y continuar en los dos ejercicios siguientes.
Por otro lado, la dirección da a conocer hoy en una reunión con el comité de empresa las cifras de su plan de reestructuración, y en particular la de los empleos que quiere suprimir de aquí a 2015, y que según "Les Echos" rondarán los 5.000 para una plantilla de 56.586 empleados (70.307 incluyendo las filiales).
El diario económico precisó que de esos 5.000 empleos, una tercera parte deben desaparecer por la no sustitución de los que se vayan jubilando y el resto con salidas voluntarias y otros dispositivos, entre los que se quieren evitar los despidos forzados.
La aerolínea, que ha sufrido en los últimos años la competencia de grandes compañías asiáticas en las líneas de largo recorrido y de las de bajo costo en corta y media distancia, pretende ganancias de competitividad del 20 % en un contexto de incremento de su oferta de como máximo un 5 % en los dos próximos años, un ritmo notablemente inferior al que tuvo antes de la crisis.
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