(ampliación) acs acusa a iberdrola de buscar "poderes exorbitantes" y de restringir el derecho de voto del accionista

El secretario general de ACS, José Luis del Valle, acusó este viernes al Consejo de Administración de Iberdrola (compañía en la que ACS ostenta una participación cercana al 19,4%) y, en concreto, a su presidente Ignacio Sánchez Galán, de pretender acaparar "poderes exorbitantes" en la empresa y limitar, a la vez, los derechos de los accionistas, que son "los verdaderos propietarios de la compañía". La constructora votó en contra de la gestión de Sánchez Galán, en la Junta de Accionistas de la eléctrica.
Del Valle intervino este viernes en la Junta de General de Accionistas de la empresa, celebrada en Bilbao. Allí anunció su intención de votar en contra de la mayor parte de las propuestas que forman parte del orden del día.
En concreto, la constructora (máximo accionista de la eléctrica, con una participación superior al 19%) no dará su visto bueno a la gestión del Grupo en el ejercicio 2010, en la que advierte una "obsesión" por "evitar la participación activa del principal accionista en defensa de sus intereses" y por "impedir su presencia en el Consejo".
ACS tampoco dará su confianza al Consejo de Iberdrola en relación a las directrices de la política del Grupo en 2011, ya que entiende que esto equivaldría a darle “carta blanca”.
Otro de los puntos rechazados por la compañía que preside Florentino Pérez es la delegación en el Consejo de la facultad de ampliar el capital, ya que –a su entender- hasta ahora han usado este derecho para “la dilución del capital” en contra de los intereses de los accionistas, señaló.
“Ningún estatuto, Consejo ni presidente puede suspender, restringir o denegar el principal derecho político que tiene un accionista: su derecho a voto”, dijo este representante de ACS.
A su juicio, lo que el Consejo de Iberdrola pretende es “muy grave”, ya que, añadió, intenta “subvertir los principios rectores de toda sociedad anónima” y “colocar en la cúspide social al Consejo y al presidente, por encima de la Junta”. En este sentido, recordó a los miembros del Consejo que “son ustedes quienes están al servicio de los accionistas y no al revés”.
ACS también se posiciona en contra del cambio estatutario que implica la reducción del número máximo de consejeros (de 15 a 14) y de lo que entiende que es una limitación del derecho de voto del accionista, en lo que atañe a la defensa de cuestiones que afecten a sus intereses.
Por último, Del Valle sacó a colación el conflicto judicial abierto entre ACS e Iberdrola. A su juicio, la decisión del Tribunal Supremo dará marcha atrás a la resolución que da la razón a la eléctrica (que rechazó la entrada de ACS en su Consejo, alegando un conflicto de intereses entre ambas).
Además, exigió que se aplique la misma “vara de medir” a BBK (presente en el Consejo de Iberdrola, compañía en la que ostenta una participación del 7,1%) tras la entrada de su presidente en el Consejo de Repsol (compañía energética y, además, vinculada a Gas Natural Fenosa, es decir, “competidora directa”).
No se deben añadió, aplicar “soluciones diferentes allá donde se producen iguales problemas”, por lo que “si se quiere ser consecuente, se debe excluir del Consejo a BBK”, que podría tener, con su presencia en la petrolera, acceso a información confidencial.
Finalizada la Junta, Del Valle indicó que Iberdrola cuenta con un plazo de siete días para responder por escrito a sus preguntas. La compañía se reserva el derecho a impugnar los acuerdos de la Junta.