(ampliación) el gobierno pide ayuda a europa para sanear el sistema financiero

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, anunció este sábado la intención del Gobierno de solicitar financiación europea para el saneamiento de las entidades financieras españolas.
Así lo indicó en la rueda de prensa posterior a la videoconferencia del Eurogrupo, donde se dan cita los ministros de Finanzas europeos, en la que se ofreció a España un respaldo para sanear el sistema financiero, por una cuantía máxima de hasta 100.000 millones de euros.
De Guindos subrayó que en las actuales incertidumbres, el Gobierno español tiene la "firme determinación" de contribuir al restablecimiento de la confianza en el euro y aseguró que no ha habido presiones del resto de países europeos para solicitar este respaldo.
Sobre la cuantía, destacó que contiene un “amplio margen de seguridad”, más allá de las necesidades reales de capital que puedan requerir las entidades. La cifra dependerá de los análisis encargados por el Gobierno a expertos independientes.
El Gobierno ha encargado valoraciones independientes a Oliver Wyman y Roland Berger, para conocer la situación real de las entidades financieras y sus necesidades de capital, que se prevé se entreguen no más tarde del 21 de junio. Además, otro grupo de auditoras entregarán informes antes del 31 de julio.
En todo caso, De Guindos hizo referencia al informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), en el que se cifran las necesidades de capital alrededor de los 40.000 millones de euros.
Según el titular de Economía, “todo parece indicar” a la vista de las distintas estimaciones conocidas, que las necesidades serán “manejables”, teniendo en cuenta el “importante esfuerzo” hasta ahora realizado por los bancos españoles.
Por ello, aseguró que “la cuantía de 100.000 millones es suficientemente elevada para no dejar resquicio a la duda”, para añadir que la cantidad finalmente necesaria “la fijará España cuando tengamos todas las valoraciones”.
De Guindos quiso dejar claro que se trata de un préstamo de Europa al Fondo de Restructuración Ordenada Bancaria (Frob) en condiciones “extremadamente favorables” y “mucho mejores que las del mercado”.
Pese a que el receptor del dinero será el Frob, el responsable de hacer frente a la deuda será el Estado español, por lo que los intereses de dicha ayuda repercutirán en déficit y en la ratio de deuda sobre PIB.
Sin embargo, se mostró convencido de que en los próximos días habrá una menor presión sobre la deuda española, lo que supondrá una menor tensión para las emisiones que realice el Tesoro Público.
Una vez se haga efectivo el préstamo, será el Frob el que lo trasladará a los bancos que lo requieran, entidades a las que se les exigirán planes de restructuración y saneamiento, que podrían incluir venta de participaciones industriales.
“Las condiciones se le van a imponer a los bancos, no a la sociedad española”, dijo el responsable de Economía, quien agregó que el Eurogrupo no ha puesto ni condiciones en el ámbito macroeconómico ni en el fiscal. Los condicionantes serán sólo para el sector financiero.
El FMI se encargará del asesoramiento, control y apoyo al cumplimiento del programa, y el acuerdo no tiene ningún tipo de impacto sobre el papel del Banco de España, que seguirá siendo el “máximo responsable” de la supervisión y el control de las entidades españolas.
PAPEL DE RAJOY
El ministro defendió que la decisión se ha tomando en el momento “conveniente”, y agregó que “el acuerdo es bueno para la economía española y el futuro de la zona euro, porque pone de manifiesto el absoluto compromiso de los países con el proyecto de la moneda única”.
En el caso de España, destacó que “las familias y las empresas se van a encontrar con bancos más solventes y más fuertes que están en condiciones de dar créditos”.
Preguntado por el hecho de que fuera él y no el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien dieras las explicaciones sobre esta medida, De Guindos señaló que es él quien representa a España en el Eurogrupo, órgano que ha tomado la decisión.
En todo caso, subrayó que Rajoy ha estado “absolutamente involucrado” y ha jugado un “papel fundamental”. “Sin la ayuda del presidente no se habría llegado a este acuerdo; ha mantenido contactos con dirigentes extranjeros y ha coordinado la actuación del equipo económico del Ejecutivo”, añadió.