Barcina apoya que se corte el grifo a los gobiernos con mucha deuda

La presidenta de Navarra, Yolanda Barcina, defendió este domingo que el Estado lleve a cabo un "control clarísimo del presupuesto" del resto de las administraciones públicas e incluso paralice el traspaso de impuestos u otra clase de ingresos cuando tengan una deuda demasiado elevada.
Durante una entrevista a Servimedia, Barcina valoró así la propuesta del ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, para obligar a las comunidades autónomas a cumplir el principio de estabilidad presupuestaria e incluso sancionar a los dirigentes políticos que excedan el gasto presupuestado.
Barcina puso como ejemplo el caso de la Comunidad Foral de Navarra, donde explicó que a algunos ayuntamientos se les ha cortado el grifo de la financiación y "no podían hacer inversiones si el gobierno autonómico no lo autorizaba" previamente.
A su juicio, este mecanismo sería útil para controlar las cuentas del conjunto de las administraciones públicas y contribuir al objetivo nacional de reducir el déficit, que no puede superar el 4,4% al término de 2012, según la exigencia de la Unión Europea.
"Esa relación entre administraciones a la hora de tranferir fondos se ha hecho en Navarra y habrá que seguir haciéndola en este momento con más control, pero respetando la autonomía de cada uno", dijo.
A su juicio, la crisis económica actual obliga a que las comunidades autónomas hagan "verdaderos esfuerzos en este momento" para reducir el gasto público, dado que resulta imprescindible "apoyar una estabilidad presupuestaria como la mejor contribución a que la economía de nuestro país vaya por la senda que le corresponde".
Barcina no quiso pronunciarse sobre las sanciones concretas que tendrían los cargos públicos que despilfarren el dinero de las instituciones, ya que prefiere esperar a ver "en qué se concretan" las declaraciones que al respecto hizo el ministro Cristóbal Montoro.
Puntualizó que "no se puede tratar igual a desiguales", ya que "aquel que cumple no puede ser tratado igual que el que no cumple". En este sentido, recordó que Navarra tiene un organismo propio que anualmente audita las cuentas de la comunidad y garantiza el principio de estabilidad presupuestaria.
Finalmente, recalcó que su partido, Unión del Pueblo Navarro, "no es partidario" de subir impuestos a los ciudadanos, pero apoya la decisión del Gobierno de Mariano Rajoy de elevar el IRPF y el IBI como solución para reducir el déficit y cuadrar las cuentas del Estado.
"Siempre hemos pensado que el dinero está mejor en el bolsillo de los ciudadanos y más en este momento tan delicado económicamente. Pero somos conscientes de que hay una situación muy difícil y lo apoyamos, siempre que sea una medida puntual y estos impuestos vuelvan a su sitio en cuanto se arregle este gran déficit", dijo.
Dado que Navarra tiene su propio régimen de impuestos, Barcina indicó que la comunidad debe fijar "una presión fiscal equivalente" al resto de España, pero piensa mantenerla a un nivel "menor, porque nosotros vamos cumpliendo desde hace más tiempo y tenemos menos problemas que el que se ha encontrado el señor Montoro".