Bordeando el abismo griego

Pedro Vega

Madrid, 25 feb.- La zona euro ha bordeado el abismo griego y ha salido de nuevo al rescate del país heleno para evitar su quiebra y consiguiente salida de la moneda única que, según algunos cálculos, hubiera tenido un coste superior al billón de euros.

El martes, tras arduas negociaciones entre el eurogrupo y las autoridades griegas, y de estas con el Instituto Internacional de Finanzas, que representa a los acreedores privados, hubo luz verde a un segundo rescate, esta vez de 130.000 millones de euros, que serán liberados de forma gradual al ritmo que Atenas aplique las nuevas reformas que exige el acuerdo.

Acuerdo que ha sido posible después de que los acreedores privados, la banca, asumiera una quita del 53,5 % del valor nominal de los bonos griegos, y todo ello para lograr una rebaja de la deuda helena desde el actual 160 % del Producto Interior Bruto, hasta el 120 % en 2020.

Nada de esto ha calmado a las agencias de calificación de riesgo que han rebajado de nuevo sus notas sobre Grecia, y el mismo día que se aprobaba el rescate, la agencia Fich colocaba su deuda soberana en el nivel "C", al borde del impago.

Y no ayudan las previsiones sobre la evolución de la economía helena que tras varios años de recesión caerá este año mucho más de lo previsto, hasta el 4,4 %, mientras que también se ha revisado al alza su previsión de déficit público, del 5,5 al 6,7 %.

La opción del rescate, la menos mala, no ofrece, sin embargo, garantías de éxito, ni descarta la necesidad de nuevas ayudas como aprecia el ministro alemán de finanzas, Wolfrang Schauble, que en una carta dirigida al parlamento alemán reconocía su desconfianza sobre la efectividad de este nuevo salvamento de Grecia.

El próximo 1 de marzo los ministros de Finanzas de la zona euro evaluarán si Atenas ha cumplido sus últimas exigencias para comenzar a liberar los fondos de la ayuda.

La siguiente etapa, que también se abordará de inmediato, será reforzar los cortafuegos para evitar contagios y revisar el techo de los 500.000 millones de euros del Fondo Europeo de Estabilidad Presupuestaria que tendrá que contar con el visto bueno de los Jefes de Estado y de Gobierno de la zona euro.

De puertas para adentro, en su habitual reunión de los viernes, el Consejo de Ministros aprobó medidas para que los proveedores a los que se les debe dinero puedan cobrar las facturas que les adeudan los ayuntamientos y que están estrangulando a pequeñas empresas y autónomos.

La Reforma Laboral sigue provocando reacciones y, entre ellas, esta semana el PSOE advertía que han indicios de inconstitucionalidad en algunos de sus apartados y que acudirá al alto tribunal si no se modifica.

En las bolsa, tercera semana consecutiva de pérdidas, que en el último ciclo semanal se saldaban con un retroceso del 1,49 %. La bolsa española, junto con la de Milán (-0,36 %) fueron las únicas que sumaron pérdidas, mientras que París ganaba un 0,80 %, Londres un 0,51 % y Fráncfort un 0,24 %.

El Tesoro no tuvo problemas para colocar el martes 2.500 millones de letras a tres y seis meses a unos tipos de interés desconocidos desde hace tiempo, 0,44 % y 0,78 %, respectivamente, frente al 1,33 y 1,9 % de la anterior subasta de las mismas características.

Por su parte, la prima de riesgo se ha mantenido estable a lo largo de la semana y cerraba el viernes en 316 puntos básicos sobre el bono alemán.

En terreno "macro", el presidente Rajoy ha admitido que la economía española caerá este año más del uno por ciento que prevé la Comisión Europea, y otros analistas barajan previsiones en torno al 1,5 %.

Alemania también se contrajo, un 0,2% en el último trimestre de 2011, aunque en todo el año el registro fue del 3 % en positivo. Para la zona euro la previsión es de recesión ya en este trimestre, y de un retroceso del 0,3 % para todo el año.

El petróleo se encuentra en máximos de los últimos meses debido a la tensión que está transmitiendo Irán a los mercados y su decisión de suspender sus ventas a Francia y Alemania.

Y el sector inmobiliario no levanta cabeza. La constitución de hipotecas sobre viviendas, que lleva cinco años a la baja, cerró 2011 con una caída del 33 %.

La próxima semana tendremos paro en España, PIB de EE.UU., donde también se publicará el Libro Beige de la Reserva Federal, y habrá también una cascada de resultados de empresas.