Brufau, presidente de Repsol, cobró 7 millones de euros en 2011

Madrid, 29 feb.- El presidente de Repsol, Antonio Brufau, cobró el año pasado 7 millones de euros: 2,368 millones de retribución fija, a la que se sumaron 1,942 millones en variable y 2,772 millones por una gratificación extraordinaria por los resultados de 2010.

Esta gratificación extraordinaria -derivada de la entrada de la china Sinopec en la filial de Repsol en Brasil y que llevó a la petrolera a triplicar sus ganancias en 2010- hizo que Brufau cobrara un 78 % más que en 2010, cuando recibió 2,31 millones en retribución fija más 1,62 millones en variable, es decir 3,93 millones.

Si se comparan las dos retribuciones sin ese bonus extraordinario, Brufau ganó un 9,6 % más en 2011.

La retribución del presidente de la petrolera está en línea, por ejemplo, con la del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán.

Según la información facilitada por la compañía en el informe anual de gobierno corporativo, a estas cantidades se suman, en ambos ejercicios, unos 2,7 millones por pólizas de seguros, aportaciones a planes de pensiones y premios de permanencia.

En total, las retribuciones de Brufau y de Luis Suárez de Lezo - que recibió 900.000 euros de fijo, 1 millón de variable y 1,6 por el extraordinario- como miembros del Consejo que desempeñaron responsabilidades ejecutivas suman 11,4 millones de euros, prácticamente el doble de hace un año.

En suma, el Consejo de Repsol -ejecutivos, dominicales e independientes- recibió 16,3 millones de euros de retribución de 2011 frente a los 11 millones de hace un año.

En cuanto a la remuneración de la alta dirección de la petrolera, formada por 10 ejecutivos, fue de 18 millones de euros, un 44 % más que los 12,5 millones de 2010, cuando 9 directivos formaban este grupo.

La petrolera presentó hoy sus resultados de 2011, cuando logró un beneficio neto de 2.193 millones de euros, el 53,3 % menos que el año anterior, debido a la menor producción por el conflicto de Libia y a que en 2010 triplicó sus ganancias tras dar entrada en su filial de Brasil a la china Sinopec.