Casa Gerardo ofrece su cocina con estrella Michelin en cáterin

  • Casa Gerardo, con una estrella Michelin y tres soles Repsol en Prendes (Asturias), amplía negocio con la creación de un servicio de cáterin que busca satisfacer "tanto a una familia que quiera comer en su casa" sus platos como "a hasta 400 personas en una fiesta".

Madrid, 27 jul.- Casa Gerardo, con una estrella Michelin y tres soles Repsol en Prendes (Asturias), amplía negocio con la creación de un servicio de cáterin que busca satisfacer "tanto a una familia que quiera comer en su casa" sus platos como "a hasta 400 personas en una fiesta".

Así lo ha explicado hoy a Efe el cocinero Pedro Morán, quien ha añadido que este nuevo servicio incluye la posibilidad de recibir clases de cocina a domicilio para aprender a elaborar, por ejemplo, su reputada fabada.

"Con esta situación económica hay que buscar alternativas a los restaurantes de alta cocina para generar ingresos", ha reconocido Morán, quien añade que "con la misma ilusión y calidad" van a por el cliente "si él no viene, amoldándonos a sus apetencias".

Esta "apuesta gastronómica" está ya disponible en todo el Principado de Asturias y "en cualquier lugar de España si se trata de un evento que rentabilice el desplazamiento".

"Nos ponemos a disposición de lo que pida el cliente, sin un guión", detalla Morán quien, junto a su hijo Marcos, está al frente de Casa Gerardo, una histórica casa fundada en 1882 por su familia.

Su cocina ya dio el salto a Londres este año con Hispania London, un local de 950 metros cuadrados en el corazón de la City que constituye el espacio más grande de Europa dedicado a la gastronomía española.

"Está funcionando muy bien, con una aceptación de la comida por parte de los clientes extraordinaria. A partir de septiembre cambiaremos parte de la carta para dar un pasito adelante, con una cocina más compleja en nuestra línea: española tradicional modernizada", añade.

Porque la familia Morán es partidaria "de coger por los cuernos el toro de la crisis y aportar, teniendo más capacidad de sacrificio; y al final te realizas, porque se pasa mucho mejor trabajando que mirando las musarañas".

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