Colegio Pilotos pide gobierno que no deje morir la industria aérea española

  • El Colegio de Pilotos (COPAC) ha pedido al gobierno que no deje morir la industria aérea española y que tome medidas fiscales y laborales para salvarla, y ha pedido un cambio de actitud "transparente y colaborador" frente al oscurantismo reinante en el sector aéreo.

Madrid, 17 sep.- El Colegio de Pilotos (COPAC) ha pedido al gobierno que no deje morir la industria aérea española y que tome medidas fiscales y laborales para salvarla, y ha pedido un cambio de actitud "transparente y colaborador" frente al oscurantismo reinante en el sector aéreo.

Así lo ha manifestado a Efe el Decano del Colegio de Pilotos, Luis Lacasa Heydt, que ha expresado su esperanza de que el ministerio de Fomento, que preside, Ana Pastor, comience a "proteger la industria nacional, como hacen en otros países".

"Percibimos que los nuevos responsables del ministerio se han dado cuenta de las carencias del sector aéreo español con datos objetivos", ha asegurado Lacasa, quien ha recordado que el informe elaborado por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), ratifica la tesis de los pilotos de que hace falta un cambio de actitud en España.

Según el responsable del COPAC, el informe de OACI incidía en la falta de personal de la Agencia Española para la Seguridad Aérea (AESA) para hacer sus tareas de vigilancia de la seguridad operacional.

Por ello, el Colegio ha informado a los nuevos responsables de Fomento de "la falta de conocimiento y experiencia de nuestra autoridad sobre la operación de aeronaves" y ha dicho que es más necesario hacer "inspecciones de calidad en vez de apostar por realizar un número elevador ellas".

Ha abogado también porque se hagan públicas las sanciones impuestas a los operadores aéreos para que "sean un ejemplo y sirvan para corregir actitudes".

"Hay que generar un clima de confianza", ha asegurado Lacasa, quien también ha apostado por colaborar con AESA para que este organismo "tenga capacidad de supervisión real sobre los problemas detectados y sobre la deriva de la industria hacia el todo vale".

En este sentido, ha reiterado sus críticas al informe elaborado por la Comisión de Investigación de Accidentes de Aviación Civil (CIAIAC) sobre el siniestro del avión de Spanair en Barajas en 2008, que costó la vida a 154 personas.

A juicio del COPAC, este informe "no es eficaz para prevenir accidentes", ya que se ha hecho con criterio judicial y no técnico.

Su objetivo es "descargar las responsabilidades en los pilotos en base a un error humano y pasar por alto el resto de causas del accidente, que son en las que hay que incidir para evitar que un error humano acabe en tragedia".

Además, asegura que el informe "pone de manifiesto las deficiencias de conocimiento y de eficiencia de la CIAIAC a la hora de analizar un accidente"y "deja campo abierto a las malas practicas".

El representante de los pilotos cree que se priman los criterios económicos por encima de la seguridad" y reclama que se otorgue capacidad de decisión al comandante.

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