Comediante y exprimera dama batallan por balotaje en Guatemala

  • Cuando falta menos de un mes para la segunda vuelta presidencial en Guatemala, el comediante derechista Jimmy Morales y la exprimera dama Sandra Torres se lanzan a la batalla final por los votos en este país convulso y hastiado de la corrupción.

Morales, postulado por el partido FCN-Nación y ganador de la primera ronda, ha centrado sus esfuerzos en visitar el occidente indígena, mientras que Torres, de la socialdemócrata Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), busca ganar adeptos en las zonas urbanas.

"Será una lucha bastante intensa" en el balotaje previsto para el 25 de octubre, afirmó a la AFP el analista político José Carlos Sanabria, de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES).

Según el experto, ambos candidatos se enfocan en subsanar las debilidades expuestas en sus respectivas campañas en la primera vuelta, cuando se evidenció que los centros urbanos le apostaron a Morales en rechazo a los políticos tradicionales, y el voto rural favoreció a Torres por los programas sociales que implementó durante el gobierno de su exesposo Álvaro Colom (2008-2012).

"Donde Jimmy tiene fortaleza, Sandra tiene una debilidad y viceversa", apuntó Sanabria.

El cómputo final de la elección presidencial del pasado 6 de septiembre ubicó a Morales como ganador de la primera ronda con el 23,99% de los 4,8 millones de votos válidos y a Torres en segundo lugar, con el 19,75%.

De acuerdo con datos del Tribunal Electoral, la tercera casilla correspondió al empresario derechista Manuel Baldizón, postulado por el partido Libertad Democrática Renovada (Líder), con 17.904 votos menos que Torres.

Antes de conocer los resultados finales, Baldizón se retiró del proceso electoral alegando fraude.

Analistas políticos atribuyen la victoria del comediante Morales a un sentimiento de rechazo a los políticos tradicionales que se exacerbó tras un escándalo de corrupción en las aduanas destapado en abril pasado.

El caso arrastró al entonces presidente Otto Pérez y a la vicepresidenta Roxana Baldetti, quienes renunciaron, ella en mayo y Pérez el pasado 2 de septiembre, en medio de masivas demostraciones de rechazo a su gestión. Ambos se encuentran en prisión preventiva.

"En alguna medida Jimmy Morales está capitalizando o atrayendo el voto antisistema, contra la política tradicional que lo posiciona como una candidato diferente", refirió Sanabria.

El pasado fin de semana, Morales visitó los departamentos indígenas de San Marcos, Totonicapán, Sololá y Quetzaltenango, en el altiplano occidental, donde intenta llevar su mensaje.

Las poblaciones indígenas constituyen el 40% de los 15,8 millones de habitantes del país, según cifras oficiales.

Sin embargo, Sanabria indicó que a pesar de su discurso de querer alejarse de la política tradicional y proclamar alianzas "con el pueblo de Guatemala", en la práctica ha realizado lo contrario y ya se han evidenciado acuerdos con otros partidos.

Morales también viajó a Estados Unidos para acercarse a la importante comunidad de casi 1,3 millones de guatemaltecos que viven en ese país.

De su lado, Torres ha recorrido varias zonas populares de la capital, visitado hospitales públicos y utilizando el transporte público para promocionarse para atraer el voto citadino.

Sanabria detalló que una de las situaciones evidenciadas en la primera ronda fue el apoyo de las comunidades rurales a Torres, quien coordinó varios programas sociales emulados de Brasil como los "comedores solidarios", escuelas de artes y las transferencias condicionadas a familias en situación de pobreza, que alcanza al 54% de la población.

El apoyo por los programas sociales "no es la variable determinante, hay muchas otras pero es una variable que pesa significativamente", detalló el analista sobre Torres, quien en 2011 intentó postularse a la presidencia al divorciarse de Colom, para evadir una prohibición constitucional.

A pesar de que ambos candidatos buscan el apoyo del campo, el dirigente indígena Daniel Pascual indicó a la AFP que ninguno cuenta con propuestas concretas y serias para promover el desarrollo rural integral y la conflictividad por minería, entre otras dificultades sociales.

"No están diciendo nada nuevo. De los grandes problemas sociales no hablan nada", apuntó Pascual, líder del Comité de Unidad Campesina (CUC).

hma/on/yow

Mostrar comentarios