Competencia tacha de “insatisfactoria” la liberalización ferroviaria y critica el papel de renfe y adif

Un informe de la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) sobre la liberalización del sector ferroviario, tras ocho años desde su implantación, revela que el ferrocarril ha perdido peso respecto al resto de modos de transporte de mercancías en España y que las empresas ferroviarias alternativas a Renfe tienen una cuota de mercado muy reducida, lo que considera “una situación insatisfactoria”.
Por todo ello, el informe formula un total de 26 recomendaciones, divididas en nueve bloques, que se dirigen al Gobierno con el objetivo de superar o mitigar los factores anticompetitivos y facilitar una mayor competencia efectiva en el transporte de mercancías por ferrocarril en España.
Según Competencia, numerosos indicadores muestran en España una evolución más negativa de este sector y un menor éxito en la introducción de competencia respecto al resto de las principales economías de la Unión Europea.
En el mercado de prestación de servicios de transporte ferroviario de mercancías, la CNC constata la preeminencia de Renfe, cuya cuota de mercado se acerca al 85%, situación que se ve reforzada por la posición que ostenta en mercados relacionados, necesarios para prestar el servicio de transporte: la disponibilidad de material rodante y los servicios de mantenimiento y reparación de material rodante.
Sobre Adif, advierte de que es el administrador de la práctica totalidad de las infraestructuras y presta directamente los servicios logísticos en las terminales de la Red Ferroviaria de Interés General (RFIG), donde la presencia de prestadores alternativos es muy limitada.
El informe identifica cinco grupos de factores que contribuyen a que la competencia en el transporte de mercancías por ferrocarril en España sea en la actualidad limitada, dificultando o desincentivando la entrada de nuevos operadores.
El primer factor es que las infraestructuras ferroviarias españolas presentan ciertas especificidades que limitan la longitud y velocidad de los trenes, reducen la intermodalidad con el resto de modos de transporte y contribuyen al aislamiento del mercado español respecto al resto de países europeos.
Además, critica determinados aspectos de la administración y gestión de las infraestructuras, entre los que destacan la falta de flexibilidad en la apertura y los horarios de las terminales de mercancías en la RFIG, la falta de desarrollo de la normativa de los servicios logísticos prestados en estas terminales, que favorece que solamente los preste Adif, y la relegación de los criterios de carácter económico en la asignación de capacidad de utilización de las infraestructuras.
El tercer elemento que no facilita la competencia, según la CNC, es la regulación de acceso y ejercicio de la actividad ferroviaria, ya que para participar en el mercado es necesario contar con una serie de habilitaciones (licencia, certificado de seguridad, homologación del material rodante y personal de conducción), que pueden resultar costosas y prolongarse en el tiempo.
En esa línea, considera que la configuración actual de los cánones por el uso de la infraestructura puede desincentivar la entrada de nuevas empresas en el mercado.
Competencia también denuncia determinadas ventajas exclusivas de Renfe, entre las que destaca un trato más favorable en determinados aspectos de la regulación y el acceso de las infraestructuras como los criterios en la asignación de capacidad; su disponibilidad de material rodante excedentario, mientras que los demás agentes encuentran dificultades para acceder a material utilizable en España; su posición predominante en el mercado de mantenimiento, y ventajas institucionales, por la financiación pública que recibe y por sus conexiones con el Ministerio de Fomento y con Adif.
Por último, se refiere a la falta de desarrollo del regulador ferroviario, el Comité de Regulación Ferroviaria, que carece de personalidad jurídica y competencias sancionadoras y depende en materia de recursos del Ministerio de Fomento.
En este sentido, destaca la oportunidad de la proyectada creación de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia para reforzar su papel en el sector.