Encuesta del CIS

El 55% de los españoles creen que hay que elevar los esfuerzos contra el fraude fiscal

El sondeo 'Opinión Pública y Política Fiscal' muestra que la amplia mayoría de los ciudadanos consideran que esta es una práctica habitual en el país, además apuntan que Moncloa debe explicar mejor el destino de los impuestos.

María Jesús Montero, ministra de Hacienda en funciones
El 55% de los españoles creen que hay que elevar los esfuerzos contra el fraude fiscal. 
Alberto Ortega / Europa Press / ContactoPhoto

El 55,6% de los ciudadanos considera que la Administración hace pocos o muy pocos esfuerzos por combatir el fraude fiscal en España, según refleja la encuesta 'Opinión Pública y Política Fiscal' elaborada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) y publicada este jueves. En concreto, hay más de cuatro de cada diez que señalan que los esfuerzos destinados para luchar contra la evasión consciente del pago de impuestos son escasos, mientras que otro 13,3% entiende que son, de largo, insuficientes. Esta es una preocupación de los españoles, dado que tienen la percepción de que es una práctica habitual. Hasta un 51,6% de los encuestados creen que "existe bastante fraude fiscal" en España, mientras que otro 37% afirma que es "mucho". 

El Gobierno también parece compartir esta percepción, no solo en el plano nacional sino también en el europeo, dado que fue una de las prioridades para la presidencia española del Consejo de la Unión Europea anunciadas por Pedro Sánchez en el mes de junio. El presidente del Gobierno ahora en funciones señaló que España trataría de conseguir que los estados miembro establecieran unos estándares mínimos y comunes de tributación empresarial, con el objetivo de combatir la evasión fiscal de las grandes multinacionales. "Una evasión que cada año le cuesta a Europa 1,5 puntos de PIB, esto es, lo mismo que invierte en construir viviendas públicas y en proteger el medioambiente", destacó entonces.

El documento preparatorio de la presidencia establecía que el organismo debería avanzar hacia la “armonización fiscal” con el fin de acabar con los paraísos fiscales dentro de la UE y evitar el dumping fiscal -como se conoce a la práctica de conseguir pagar importes menores de forma irregular- por el que algunas empresas tributan en países con reglas más ventajosas en lugar del país en el que facturan. Además de esta cuestión, los impuestos tendrán un papel protagonista en la presidencia, dado que la UE debe adoptar las nuevas reglas fiscales que permitan volver a una política normalizada, tras años de gasto "libre" para hacer frente a la pandemia de la covid.

Casi el 30% pide más explicaciones sobre financiación

La mayoría de la ciudadanía considera también que los esfuerzos del Gobierno por aclarar a qué se destinan los impuestos son insuficientes. En concreto, casi la mitad de los españoles afirma que los intentos por explicar que se financia con los fondos recaudados son "pocos", mientras que un 29,4% llega a decir que son "muy pocos". Además más de uno de cada tres encuestados muestra preocupación por el efecto del fraude fiscal en la financiación de servicios públicos, señalando a la falta de recursos para dedicar a estos como el principal efecto de la evasión fiscal.

Entre las razones principales para engañar a Hacienda, el 21,7% de los españoles piensan que el fraude se da sobre todo porque los declarantes con rentas más elevadas quieren evitar el pago de impuestos. Por otra parte, el 68,4% por cierto se ha mostrado de acuerdo con que lo único que impide que más individuos defrauden en a declaración de la renta es el miedo a ser objeto de una revisión, aunque un 80,4% ve poco o nada probable que el organismo público inspeccione su declaración.

Respecto a la confianza de los entrevistados en la sinceridad de su entorno a la hora de declarar, un 46,5% afirma que todas o casi todas las personas que conoce anota sus ingresos reales para el cálculo del IRPF. Sin embargo, ese porcentaje baja cuando se pregunta sobre el IVA, ya que solo un 33,8% afirma que casi nadie de su entrono defrauda al declarar este impuesto.

El comportamiento que menos tolerable se considera es el fraude para lograr una prestación social que no corresponde, que un 81,9% no aprueba bajo ningún concepto. Hasta ocho de cada diez españoles califican de "nada tolerable" que una gran empresa evada el impuesto de sociedades, pero la cifra baja hasta el 58% cuando se trata de entidades de pequeño tamaño.

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