Madrid, 28 sep.- El consumo de alimentos se incrementó en julio el 2,5 % con respecto al mismo mes del año anterior, con 2.609 millones de kilos, mientras que el gasto registró un ligero descenso del 0,2 %, hasta 5.316 millones de euros.
Así lo refleja el Panel de Consumo Alimentario en el Hogar publicado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, que destaca la estabilidad en el gasto, debido a la caída de los precios medios de los alimentos en un 2,6 %.
El mayor incremento en el consumo fue, al igual que en el mes anterior, para el capítulo de bebidas, con un 19,6 % más para los vinos de mesa, y un 9,2 % más para los espumosos.
También subió el consumo de agua envasada, el 7,2 %, de refrescos, el 4,1 %, y el de cerveza, el 6,9 %.
El Ministerio destaca asimismo el incremento en el consumo de aceite, del 6 % en julio, más alto para el de oliva, hasta el 7,2 %, aunque también el de girasol aumentó el 1,1 %.
Creció además un 5,1 % el consumo de legumbres, un 3,1 % el de pan y un 3,4 % el de azúcar.
En conjunto, los hogares españoles consumieron el 2,6 % más de fruta fresca, subida que llega al 10 % para los limones, al 9,6 % para la sandía, al 8,5 % para el plátano y al 7,4 % para el melón.
Por el contrario, cayó la demanda de peras en un 13,5 %, la de melocotones en un 9,4 % y la de manzanas, en un 5,7 %.
También se redujo el consumo de hortalizas en un 3,7 %, con incrementos solo en las patatas frescas, del 2,6 %.
Entre los productos cárnicos, los hogares españoles compraron un 3 % más de pollo, mientras que bajó la compra de carne de vacuno un 3,6 % y la de ovino y caprino un 8,1 %.
Descendió igualmente el consumo de pescado, el 2,5 %, principalmente a causa de la caída del marisco, del 6,9 %, y del pescado congelado, del 6,3 %, aunque el fresco disminuyó un 0,5 %.
En lo que respecta al último año móvil (de agosto de 2011 a julio de 2012), el consumo de alimentos en los hogares españoles aumentó el 1,6 % hasta 30.544 millones de kilos, mientras el gasto creció el 1,4 % hasta 67.681 millones de euros.
El consumo per cápita aumentó el 1,1 %, con una media de 1.466,63 euros por persona al año.
En los doce meses citados, las mayores subidas en el consumo fueron para café e infusiones, del 5,8 %, y lácteos, del 4,5 %.
Se consumió también un 2,1 % más de huevos, un 1,4 % más de pan y un 1,7 % más de arroz.
En el caso de la carne, se registró un aumento general del 2,2 %, a causa de la subida en el consumo de pollo, del 2,5 %, y de cerdo, del 0,9 %, mientras que se mantiene la caída para el ovino y caprino, del 8,3 %.
Cae igualmente el consumo de pescado y de marisco, el 1 y el 1,8 % respectivamente, con las conservas de pescados y moluscos como único producto que crece en este apartado, con el 2,5 % más.
Los datos anuales reflejan asimismo que se fortalece el consumo de frutas frescas, el 4,1 % más, con los mayores crecimientos para albaricoques y sandía, del 13,3 y del 12,3 % respectivamente.
En menor medida, subió el consumo de hortalizas y patatas, hasta un 1,4 % más.
El aceite compartió la tendencia general al alza, con un 1,6 % más, principalmente gracias a la subida en el consumo del de oliva, del 1,4 %, aunque también al de girasol, del 0,5 %.
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