Madrid, 30 jul.- El Estado cerró junio con un déficit en términos de contabilidad nacional de 40.001 millones de euros, lo que supone una caída del 8,2 % respecto al de un año antes y sitúa el desequilibrio de sus cuentas en el equivalente al 3,81 % del PIB, según los datos publicados hoy por el Ministerio de Hacienda.
De esta forma se supera el objetivo comprometido por la Administración Central para 2013 (3,7 % del PIB), si bien la evolución de la ejecución presupuestaria hasta junio no condiciona la del conjunto del año.
El déficit del Estado es consecuencia de unos ingresos (recursos no financieros) de 49.528 millones, el 12 % más que un año antes, y de unos gastos (empleos no financieros) de 89.529 millones, el 2 % más.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha considerado en un comunicado que la reducción del déficit estatal conseguida en la primera mitad del año "aporta fortaleza" al cambio de tendencia de la economía, que se encuentra al final de la recesión.
En su opinión, el saneamiento de las cuentas públicas está contribuyendo a ese cambio, que cree que también se constata en el hecho de que esté aumentando la recaudación tributaria, señal de recuperación.
Hasta junio los ingresos del Estado han crecido en buena medida por la mejora de la recaudación de impuestos, sobre todo el IVA, aunque esa mejoría se ha visto contrarrestada por el aumento del gasto provocado por los intereses de la deuda pública.
El gasto en intereses ha ascendido a 13.984 millones de euros, un 14,4 % más que en el mismo periodo de 2012.
Sin tener en cuenta dicha carga financiera, se ha obtenido un déficit primario de 26.017 millones de euros, inferior en un 17 % al del año anterior.
La mayoría de los recursos no financieros, 43.214 millones, se corresponden con los ingresos fiscales, impuestos y cotizaciones, lo que supone el 4,8 % más que en junio de 2012.
Los ingresos por impuestos han aumentado el 4,7 %, hasta 37.294 millones, en tanto que los provenientes de cotizaciones han crecido el 5,5 %, hasta 5.920 millones.
El IVA, con 12.248 millones, ha aumentado el 16,9 % por la subida de tipos, en tanto que los demás impuestos sobre la producción y las exportaciones han crecido el 14,9 %, hasta 4.820, debido a los recursos procedentes de la fiscalidad medioambiental, el impuesto sobre el carbón y el impuesto especial sobre hidrocarburos.
Los impuestos sobre la renta y el patrimonio han ascendido a 20.153 millones, el 3,6 % menos, como consecuencia de las devoluciones de ejercicios anteriores derivadas de recursos judiciales, así como por el descenso de las retenciones del capital mobiliario.
Las rentas de la propiedad han sido de 3.956 millones, con un aumento del 61,1 % que se debe tanto a los ingresos por intereses del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) que ascienden a 530 millones de euros, sin correspondencia en el año anterior, como a los dividendos y participaciones en beneficios del Banco de España que han registrado un aumento del 83,83 % respecto a 2012.
En el aumento de los gastos ha influido, además del aumento de los intereses de la deuda, el crecimiento de las pensiones y de las trasferencias a la Seguridad Social.
Del gasto en prestaciones sociales, 5.910 millones corresponden a las pensiones de las clases pasivas, el 5,6 % más que hace un año.
Los incrementos se han compensado con el descenso del 3,1 % de las trasferencias corrientes entre las Administraciones Públicas, hasta 46.071 millones, consecuencia de las menores trasferencias a las comunidades autónomas que han pasado de 18.593 millones hasta junio de 2012 a 15.141 millones un año después.
No obstante, han aumentado un 8,2 % las trasferencias a las administraciones de la Seguridad Social (20.883 millones), de los que 11.240 millones (4.303 millones más que en 2012) han sido para el sistema de Seguridad Social y 9.643 millones (2.717 millones menos) para el Servicio Público de Empleo Estatal.
Como consecuencia del dinero recibido la Seguridad Social ha cerrado el semestre con un superávit de 9.832 millones, equivalentes al 0,94 % del PIB, que suponen un 15,47 % más que en el mismo periodo del año anterior, según los datos del Ministerio de Empleo.
La remuneración de asalariados ha sido de 9.803 millones, un gasto inferior en un 1,5 % al de junio de 2012.
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