Los tambores del empeoramiento económico han provocado la reacción de los titulares del Eurogrupo, que se pronunciaron este viernes con un mensaje tranquilizador: el organismo asegura que está "preparado para actuar" frente a un deterioro del mercado. Ante estas previsiones, varios países defendieron que los Estados miembros con superávit, como Alemania u Holanda, deberían invertirlo para responder a la desaceleración.
Los titulares económicos de la institución de la UE se reunieron este viernes en Helsinki y pusieron sobre la mesa cuestiones como el presupuesto de la eurozona, los líderes económicos debatieron las cuestiones abiertas, como el modo en que se financiará, aspectos que aspiran cerrar en octubre: "Estamos preparados para actuar si los riesgos se materializan y las cosas empeoran. En el Eurogrupo coordinaremos nuestra respuesta", declaró el presidente de la entidad, Mário Centeno, durante una rueda de prensa posterior a la reunión.
El presidente insistió en que "pese a toda la incertidumbre, seguimos siendo optimistas sobre la economía de la eurozona, que sigue creciendo, aunque a un ritmo menor". El presidente del Eurogrupo se pronunció en ese sentido después de que el jueves el Banco Central Europeo (BCE) aprobara un paquete de fuertes estímulos monetarios para apoyar la economía, porque el debilitamiento económico que atraviesa la zona del euro es más serio de lo que se pensaba.
Centeno añadió el viernes que, en la pasada crisis económica, la eurozona fue capaz de encontrar "un equilibrio en su respuesta exhaustiva, combinando políticas fiscales, reformas estructurales en el nivel nacional de la Unión Europea y la política monetaria". "Mirando adelante, ante un deterioro, necesitamos encontrar un nuevo equilibrio y la política fiscal sin duda tendrá un papel", comentó, un día después de que el propio presidente del BCE, Mario Draghi, hiciera un llamamiento a algunos gobiernos de la zona del euro para que apliquen las políticas fiscales adecuadas para estimular la economía y que los tipos de interés suban.
Este viernes, además de Centeno, repitió esa llamada el vicepresidente de la Comisión Europea para el Euro, Valdis Dombrovskis, quien subrayó que "la política monetaria sola no puede resolver la situación", e instó a los países con superávit a utilizarlo para estimular la economía. En términos similares se expresaron los ministros de Francia, Bruno Le Maire; Luxemburgo, Pierre Gramegna, o España, Nadia Calviño, quien declaró: "Se ha hablado extensamente de la necesidad de que la política monetaria se vea complementada por una acción decidida de política fiscal a nivel europeo y políticas de reformas estructurales a nivel nacional".
Preguntada por si se mantiene la división tradicional entre países del norte como Alemania u Holanda, reacios a invertir el superávit, y los países del sur, partidarios de esa medida, Calviño señaló que la situación está cambiando: "Yo creo que las cosas han cambiado esta semana. En general, todos estamos de acuerdo en que es necesario tener una política fiscal a nivel europeo más expansiva. Aquellos países que tienen más margen, pues tienen más capacidad para actuar".
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